Finalizó la 37ª edición del Dakar y con ello se consumó el regreso del equipo oficial Peugeot luego de un cuarto de siglo. De los tres 2008 DKR que iniciaron la competencia en Buenos Aires, dos de ellos pudieron completar la mítica prueba. Stéphane Peterhansel fue el mejor en el 11º lugar mientras que Cyril Despres, en su primera experiencia en autos, finalizó 34º. Solamente Carlos Sainz no pudo terminar.
“Soy positivo, por naturaleza, así que prefiero centrarme en lo bueno. Hemos conseguido que dos de tres de los coches lleguen a la meta final y el que falta es por un problema técnico. Los resultados no han estado del todo a la altura y faltaba una mejor puesta a punto, pero no hemos tenido problemas gordos”, afirmó monsieur Dakar, quien logró su mejor resultado en la cuarta y en la quinta etapa, cuando finalizó quinto.
Un problema en el coche en el regreso de Bolivia cuando transitaba por el Salar de Uyuni le imposibilitó al francés concluir entre los diez mejores. Hasta allí estaba octavo. “Hemos dado el primer paso. Aquí estamos, al final de la carrera y en el futuro esperamos tener un poco más de suerte… eso espero. No me siento muy frustrado. Sé que no hay milagros. En los deportes de motor, solo se puede validar recorriendo miles de kilómetros, no se pueden hacer milagros el día de la carrera”, agregó el galo quien disputó su 24º Dakar.
“Pensaba que podíamos ganar una especial en el desierto pero la ocasión no se dio. A falta de ello, acotamos los puntos sobre los que aún debemos avanzar y pudimos hacer frente a las largas jornadas con una muy buena confiabilidad. Es muy alentador, incluso pese a que el resultado final está lejos de los que habíamos esperado”, concluyó Peterhansel. Se concretó el regreso de Peugeot al Dakar; desde hoy mismo el equipo francés comenzará a trabajar para lograr más adelante en 2016.
