
En esta nueva iteración del tope de gama del Serie 1 encontramos una puesta a punto completamente enfocada al alto desempeño. Si bien para muchos el motor podría ser más potente, en lo personal me parece un gran juguete para salir a carretera y acelerar sin culpa, con mucha seguridad.
Diseño exterior
Por fuera llama poderosamente la atención la parrilla de doble riñón aplicada de forma muy horizontal, algo que en los modelos puramente M suele verse más desafiante al colocarla en posición vertical. Y no pasa desapercibido el color púrpura de la unidad de prueba, color denominado Tundernight Metallic.
Además de la parrilla doble, destacan las entradas de aire laterales que canalizan aire hacia los frenos. Los rines son de 19 pulgadas y calzan neumáticos de perfil bastante bajo.
Los laterales lucen sobrios, salvo por la inclusión de un alerón en la parte superior del medallón trasero. Ya en la parte de atrás, lo que atrapa la mirada inmediatamente son las cuatro salidas de escape con punta de aluminio, custodiadas por el difusor trasero.
En cuanto a la silueta, conserva las proporciones propias de un hot hatch, aunque el voladizo delantero (la parte de la carrocería que sobresale delante de la llanta frontal) es muy largo. Dada la poca altura al piso y la presencia de un lip, puede volverse un problema al enfrentar topes, baches o rampas.
Diseño interior
Al abrir la puerta, lo único que encuentras al interior es calidad y más calidad, tanto en materiales como en ensamble. En este caso, realmente acaricias la experiencia M completa, salvando la comparación con sus hermanos mayores.
Los asientos tipo cubo son deportivos y ofrecen una gran sujeción lateral, incluso para personas de talla grande. En todo momento tus manos descansan sobre gomas de gran tacto, piel, insertos plásticos, antracita, y no podían faltar los logotipos M aquí y allá.
La iluminación interior es activa y, en algunas partes, está rematada con aluminio que presenta patrones y filigranas hexagonales.
En cuanto a tecnología, encontramos una pantalla curva táctil de 10.2 pulgadas para el sistema de infoentretenimiento y otra de 10.7 pulgadas que funge como panel de instrumentos. Puedes emparejar tu teléfono de forma inalámbrica o mediante cable USB-C; además, es compatible con Apple CarPlay y Android Auto. Mención especial merece el sistema de audio firmado por Harman Kardon con 12 bocinas, capaz de ofrecer una experiencia auditiva de muy alta calidad.
Mecánica
El BMW M135 xDrive monta el ya conocido motor 2.0 litros TwinPower Turbo, acoplado a una transmisión de doble embrague que envía la potencia a las cuatro ruedas mediante el sistema de tracción xDrive. Genera 317 caballos de fuerza y 295 lb-pie de torque, logrando una aceleración de 0 a 100 km/h en 4.9 segundos y una velocidad máxima limitada a 250 km/h.
Seguridad
Además de discos de freno autoventilados en las cuatro ruedas, ofrece ABS, control dinámico de estabilidad, control de tracción y seis bolsas de aire.
En el apartado de asistencias a la conducción está bien equipado: incluye asistente de atención (que detecta distracciones y emite una alerta), asistente de estacionamiento, asistente de reversa, ayuda de estacionamiento lateral, cámara de reversa y sensores delanteros y traseros.
Sensaciones de manejo
Encontrar la posición de manejo adecuada es lo más sencillo del mundo en un M135: solo debes ir lo más bajo posible y dejar suficiente espacio de seguridad entre el volante y tú. Es entonces cuando empieza la magia. Al encender el motor se percibe un sonido profundo y ronco que anticipa lo que viene al acelerar.
Si sales de las calles maltratadas de la ciudad y te enfrentas a caminos más aptos, como una autopista, notarás de inmediato que se adhiere al asfalto con firmeza, sin movimientos extraños de la suspensión. La sensación es la de ir bien atornillado a un riel de tren.
El motor 2.0 litros ofrece una aceleración inmediata, sin rastro de turbo lag, y la transmisión de doble embrague demuestra que fue creada para manejar rápido, muy rápido… y divertido. Al activar el modo Sport, los cambios se estiran más, la suspensión se endurece (aún más) y la dirección adquiere un tacto más firme. El consumo de combustible aumenta, como era de esperarse, pero la diversión lo vale.
El sistema de frenos actúa con contundencia desde el primer toque y parece no fatigarse fácilmente; en todo momento responde con una potencia a la altura del motor.
Conclusión
Este M135 se ve y se siente como un verdadero M (guardando las proporciones), lo que conlleva una gran responsabilidad. Su mayor virtud es el talante deportivo de todo el tren motriz en conducción por carretera y, por qué no, en pista. Sin embargo, esa misma configuración puede jugarle en contra para el día a día en ciudades como las nuestras, donde la dureza de la suspensión y el perfil bajo de las llantas pueden ponerte en aprietos.
Ficha técnica
- Motor: 2.0 L turbo
- Potencia: 317 hp
- Torque: 295 lb-pie
- Transmisión: Doble embrague de 7 velocidades
- Tracción: Integral
- Precio: $1,179,900