Alpina es uno de los preparadores de BMW más importantes de la historia, uno que se ha ganado la posibilidad de incluso vender sus autos como una marca, y que a finales de este año se convertirá en una división de BMW AG.
Por ello, el carrocero italiano Zagato creó una edición especial del M4 (retocado por Alpina), al que llamó Bovensiepen Zagato y que presentó este fin de semana en el Concurso de Elegancia de Villa d'Este, prometiendo una edición limitada (aún sin precio y número de unidades confirmadas) que comenzará a entregar en el segundo semestre del próximo año.
Alpina Burkard Bovensiepen GmbH & Co. KG fue fundada en 1965 por Burkard Bovensiepen, en Kaufbeuren, Baviera, para retocar modelos de BMW, principalmente cambiando carburadores, cigüeñales y cabezas de motor, para sacarles más potencia. En los años 70 brilló por sus victorias en el automovilismo, incluyendo ganar las 24 Horas de Spa y el Campeonato Europeo de Turismos.
Con toda esta herencia detrás, Zagato delineó un auto que mantiene casi nada de su base original, pues toda la carrocería es de fibra de carbono, se le dotó de un nuevo frontal, tomas de aire en la fascia, el apellido del fundador en la parte baja, una salida de aire en la tapa del cofre, así como el icónico toldo de doble burbuja, sello inequívoco de cualquier Zagato, que se extiende hasta el medallón.
La parte posterior también fue modificada y volvemos a encontrar el apellido Bovensiepen entre las calaveras de LED. El conjunto de cierra con unos rines de aluminio de 20 pulgadas, con un diseño específico.
Debajo del cofre se mantiene el legendario motor seis en línea 3.0L twinturbo (de origen BMW) que fue retocado para exprimirle 600 caballos de fuerza y 516 libras-pie de torque, enviados al eje trasero mediante una transmisión automática de 8 velocidades.
Los datos de Zagato dicen que el 0 a 100 km/h se logrará en 3.3 segundos y la velocidad máxima llegará hasta 303 km/h.
La nueva suspensión integra amortiguadores Bilstein, con tres modos: Confort, Sport y Sport Plus, además de un sistema de escape de titanio, que pesa sólo 22 kilos, firmado por Akrapovič.
Por dentro, este coupé dista muy poco de lo que podemos encontrar en el M4 de serie, con dos enormes asientos deportivos en la parte delantera y una pequeña banca trasera (recordemos que zu configuración es 2+2), en este caso en un color azul cielo, con el logotipo Bovensiepen bordado en las cabeceras con un tono azul más oscuro, mismo que aparece también en el centro del volante y de los rines.
El cielo y el interior de las zonas de almacenamiento de las tapas de las puertas están forrados en un material parecido a la Alcantara, mientras que se han mantenido los insertos de fibra de carbono en el volante, tablero y la consola central, así como el cluster multimedia doble, para el tablero digital y la pantalla multimedia.
Este vehículo necesita de 250 horas de trabajo para ser completado a mano, colocando más de 400 piezas individuales.
