
Hace unos días se realizó en México un evento automotriz llamado Pastejé, que desde hace varios años se ha enfocado en reunir algunos de los mejores deportivos y vehículos exóticos que hay en nuestro país, sin embargo, para este 2025 guardó una sorpresa más, la presentación del Peralta S.
Con una inspiración totalmente retro, el estudio de diseño Giugiaro (GFG Style) creó este vehículo para el empresario, coleccionista y entusiasta automotriz mexicano Carlos Peralta, que tomó como base un Maserati MC20, para revivir los trazos del famoso Ital Design Maserati Boomerang, que fue presentado en el Salón del Automóvil de Ginebra en 1972.
Sin lugar a duda cualquier ángulo de este vehículo nos evoca a esos autos concepto y de producción de la época, no sólo ese Ital Design (que también se basaba en un Maserati), sino el Lancia Stratos, el Ferrari Modulo, el Mercedes-Benz C111 o el Aston Martin Bulldog, que imaginaban esos autos futuristas, muy afilados, con las cabinas llenas de cristales y tableros totalmente llevados a otro nivel.
"El Peralta S tiene una actitud típicamente de los años setenta y no tiene nada que ver con los coches de hoy. Quería embellecerlo con detalles, rasgos estilísticos y referencias a formas de un pasado que hizo historia, pero también es un homenaje a mi padre, a través de la reinterpretación moderna de los volúmenes del Boomerang.
"Hay decenas de deportivos icónicos que se inspiraron en esas formas, eran pura vanguardia. Para mí es uno de los estilos estilísticos más increíbles y exitosos de Giorgetto", afirmó Fabrizio Giugiaro, hijo de Giorgetto Giugiaro, con quien fundó en 2015 GFG Style.
Para su creación, se tuvo que eliminar la carrocería original de fibra de carbono y se sustituyó por una de aluminio pulido (como un espejo), que está dividida básicamente en tres partes: la zona frontal, una cúpula (tipo nave espacial) que permite la entrada al habitáculo y la zona trasera, donde está colocado el motor V6 3.0L biturbo, el famoso Nettuno, que entrega 630 caballos de fuerza y 538 libras-pie de torque, unido a una transmisión automática de 8 cambios.
Maserati publica una aceleración de 0 a 100 km/h en 2.9 segundos, que se podría ver afectada por el cambio de la carrocería y los elementos nuevos, pues el MC20 registra menos de 1,500 kilos en la báscula. Además, la velocidad máxima es de 320 km/h.
En general es diseño es bastante limpio, teniendo toda la iluminación frontal con tecnología full LED, integrada en la unión entre el cofre y el frontal, dejando en la parte inferior un delgado labio de fibra de carbono, que es otro de los guiños al pasado, pues esta pieza tiene una continuidad por toda la parte inferior de la carrocería hasta llegar al difusor trasero (recordando a las molduras de plástico negro).
En la zona trasera podemos encontrar un trabajo más elaborado, integrando la salida central del escape, otras rendijas de ventilación, las calaveras en LED y, en la parte superior, un alerón retráctil de activación automática.
Visto de lado es muy llamativa la silueta que tiene, la forma de cuña que nace en la punta del cofre y termina un poco más recta conforme llega a la zona trasera. También, saltan a la vista los rines de aluminio, que nos remiten un poco a los del BMW M1.
Finalmente, el habitáculo es una combinación retro con tecnologías modernas, incluyendo mantener el tablero digital y la pantalla multimedia, además de agregar dos pantallas para las cámaras que sustituyen a los espejos laterales.
También podemos encontrar elementos de piel, fibra de carbono y aluminio, así como botoneras para activas diversos elementos electrónicos, todo ello contrastado en negro y plata. Incluso, el diseño y acabado del volante recuerda un poco a los de Pagani.
Por obvias razones, el precio de este espectacular one-off es un misterio, pero todo el trabajo y desarrollo seguramente se contará en varios millones de pesos.