El 10 de abril falleció a los 76 años O.J. Simpson, debido al cáncer de próstata que padecía. En vida, fue un jugador de fútbol americano, que encontró su momento de mayor gloria cuando fue el running back de los Buffalo Bills. Después de retirarse de la NFL se desempeñó como actor de cine y presentador de televisión.
De hecho, fue protagonista de la transmisión de televisión que más ranking atrajo en los noventas. Cuando a bordo de su Ford Bronco 1993 de color blanco, protagonizó la mayor persecución de la historia, tras ser acusado de la muerte de su exesposa Nicole Brown y Ronald Goldman.
La persecución más mediática de la historia se realizó el 17 de junio de 1994 e inició con la ausencia de la ex estrella de la NFL a la Corte de Los Ángeles para recibir la sentencia por el doble asesinato. Ese mismo día, gracias a la ayuda de un ciudadano que vio al prófugo a bordo de su vehículo, la policía pudo dar con su paradero.
Sin embargo, el vehículo en el que viajaba O.J. Simpson y que era conducido por su amigo Al Cowlings, quien bajo amenazas no detuvo la marcha, inició la persecución con más de 20 patrullas y una decena de helicópteros. Luego de más de dos horas de ir tras la camioneta y esperar 45 minutos dentro del auto, el jugador de futbol se entregó a las autoridades.
Curiosamente, la persecución de O.J. Simpson las ventas la Ford Bronco aumentaron en junio de 1994 un 45 por ciento con respecto al mismo período de 1993.
Cabe recordar que O.J. Simpson, fue absuelto de los cargos de los que se le acusaba en 1995.Sin embargo, en 1997 fue declarado responsable civil de las muertes y tuvo que pagar una indemnización de 33.5 millones de dólares.
Cuando todo parecía haber terminado, en 2007 nuevamente fue detenido tras ser acusado de diversos delitos. Tras ser declarado culpable en 2008, estuvo encerrado hasta julio de 2017, cuando se le concedió la libertad condicional tras cumplir el mínimo de su sentencia.