Aunque la Unión Europea, EE.UU. y sus aliados impusieron sanciones a gran escala y sin precedentes contra Rusia en respuesta a la guerra que mantiene contra Ucrania, la industria automotriz de la Federación de Rusia sigue avanzando.
La startup Kama registrada en Naberezhnye Chelny en 2021 pretendía producir el primer auto eléctrico nacional en Rusia, y actualmente, nada contra corriente perfeccionando a su primogénito llamado Atom.
Con aspecto de pequeño crossover, el Kama Atom mide 3.995 m de largo, 1.780 m de ancho y 1.615 m de alto.
La compañía afirma que tendrá versiones con dos motores y tracción a las cuatro ruedas, además de llantas de 18 y 19 pulgadas.
El tren motriz del Kama Atom ofrecerá 204 caballos de fuerza y gracias a una batería de litio y fosfato de hierro de 77 kWh garantiza una autonomía de 500 km.
Kama promete una recarga rápida del 80% en 30 minutos y acelera de 0 a 100 km/h en 8 segundos.
Para 2025 comenzará la producción del Atom en la antigua fábrica de Renault en Moscú, Avtoframos, que pasó a manos de la renacida Moskvich.