Cupra es hoy la niña consentida del Grupo Volkswagen y quizás por eso es que generó tanta atención y provocó, sin quererlo, tanta polémica en el primer día del Salón de Münich. Resulta que una entrevista dada por Thomas Schäfer, CEO de Volkswagen (pasajeros), derivó en una comedia de malos entendidos y desmentidos, justo a la hora en que Autocosmos asistía a una rueda de prensa con Wayne Griffiths, CEO de Cupra y SEAT.
Por lo mismo, te aclaramos desde ya algunos conceptos que se esgrimieron hace unos días. ¿SEAT desaparece como marca? No, no rotundo. ¿Dejará de producir autos y se dedicará a otros negocios como la micromovilidad? No, tampoco. ¿Tomará Cupra su lugar en el mercado? Ya lo está haciendo y seguirá haciéndolo. ¿Hay espacio para que ambas marcas convivan? Sí, y al menos hasta 2035, según nos confirmó el ejecutivo.
Wayne Griffiths y el conceptual DarkRebel.
El problema es cómo sostener estas respuestas cuando todos parecieran querer enterrar a SEAT y cuando los números indican que podría ser una acción sensata. Bueno, la respuesta la da el propio Griffiths: "SEAT es nuestra marca de entrada y de motores de combustión, mientras que Cupra es nuestra marca ícono y electrificada. Mientras haya mercado para los vehículos de combustión, habrá mercado para SEAT. Por lo mismo, ambas pueden y deben convivir".
Pero claro, los números avalan a Cupra y de ahí su estatus de vedette en Münich. Hace unos días se entregaron los resultados financieros del Grupo SEAT, que se compone de ambas marcas, y son espectaculares, como no se veían en años. El volumen de negocio fue de 7,411 millones de euros, lo que supone un aumento de 37.8% respecto al mismo período de 2022, y las utilidades llegaron a 371 millones de euros, con un margen operacional de 5%.
Cupra sigue aumentando su participación dentro del grupo español y en el primer semestre vendió 107,300 unidades, de las 261 mil del conjunto, esto es 60% más que en el primer semestre de 2022 y en los cinco años que lleva de vida ha colocado más de 400 mil unidades, proyectando un cierre anual de unos 250 mil autos.
Destino: Estados Unidos
No es un secreto que la marca afincada en Barcelona aspira a ser más grande, con un volumen estimado de medio millón de unidades anuales ya en 2025, cuando tenga una gama de siete modelos en venta. Y para eso debe mirar más allá de las fronteras de Europa.
Es por ello que Cupra mira ahora a Estados Unidos, aunque, de momento, para después de 2025. "Si quieres ser grande, tienes que pensar en grande e ir a los mercados grandes", afirma Griffiths. "Eso sí, no se trata de hacer un experimento. Tienes que tener una gama de productos adecuado y un gran posicionamiento de marketing".
Griffiths comentó que, además, necesita productos específicos, que no tiene en su gama actual ni proyectada. Habla de una camioneta grande, por cierto, pero no de una pick-up. Esa se la dejará a la nueva marca Scout que el Grupo Volkswagen anunció para Estados Unidos.
La planta de Puebla podría acoger la producción de Cupra.
Además, necesita producir localmente y aprovechar las sinergias del grupo en cuanto a plataformas disponibles. Hoy, Volkswagen cuenta con dos fábricas de autos en México, una para Volkswagen y la otra para Audi, y una en Estados Unidos (Chattanooga, Tennessee), donde fabrica Teramont, Cross Sport y ID.4. Estas plantas podrían acercarse a un millón de unidades anuales. O sea, espacio para Cupra hay de sobra.
Ees por ello que Cupra ya empezó los trabajos de focus group y está probando sus vehículos entre potenciales clientes en la Unión Americana, y según dicen, los resultados son realmente alentadores.
"Todo pinta bien, pero para tomar una decisión como esta se requiere de mucho dinero. Ni se imaginan lo que cuesta lanzar una marca nueva en un mercado como el de Estados Unidos. Y para hacerlo, tenemos que ganar dinero ahora. Por eso, si mantenemos la proyección de resultados actual, si seguimos a este ritmo, podemos tener el dinero suficiente para entrar a Estados Unidos o incluso para fabricar un DarkRebel", aseguró el directivo.
Estrategia de productos
El nuevo Cupra Terramar.
Respecto de la estrategia de Cupra, ya se sabe que la marca avanza hacia la electrificación total hacia fines de la década, pero de aquí a cinco años no venderá sólo autos eléctricos. Y es en esta ecuación donde entra SEAT. "Tendremos dos marcas. SEAT es entry y autos de combustión, Cupra son eléctricos y gama alta".
Y Griffiths añadió que hasta 2035 se venderán autos de combustión en Europa y hasta ahí todo está claro. Después de eso ve difícil seguir produciéndolos. Quizás entonces sí podamos preguntarnos por la viabilidad de SEAT.
Lo que viene en el plan de productos ya es conocido desde el lanzamiento de una segunda era para marca a mediados de 2022.
El hermoso Cupra Tavascán.
Tanto el Cupra León como Formentor recibirán una actualización estética en 2024 y ofrecerán, además, una nueva generación del sistema híbrido enchufable del grupo con más de 100 kilómetros de autonomía totalmente eléctrica.
Antes que ellos, o quizás después, no se sabe, se estrenará Tavascan definitivo. La marca lo develó a mediados de este año y lo exhibió en formato de preseries en Münich, y lo anuncia para mediados de 2024. Por cierto, Tavascán es una SUV mediana fabricada en China y que se será 100% eléctrico.
También en 2024 llegará Terramán, el último vehículo de combustión de Cupra, que será producido en Hungría, en una de las plantas de Audi, con un propulsor híbrido enchufable (PHEV) de segunda generación.
Con R de Raval, aunque sólo como concept.
El último de la lista, por ahora, es el Raval. Se trata de la versión de producción del UrbanRebel, y que ya se está mostrando con muchas de sus líneas definitivas. Entrará al segmento B crossover con una mecánica 100% eléctrica. ¿Fecha? Finales de 2025.
¿Y no hay espacio para el DarkRebel? Parece que no.
Pero como dice Wayne Griffiths, "para ser una marca icónica necesitamos modelos icónicos. El DarkRebel es una provocación, una señal de donde queremos llegar con Cupra, un auto de imagen y no de volumen, pero todo auto ícono ayuda y es importante para hacer el volumen con el resto de la gama".
Y es que Cupra no aspira a ser una marca de volumen, y lo extraño, tampoco una marca que le guste a todo el mundo. "Cupra es una marca provocadora, emocional, no racional, impulsada por la sustentabilidad, el diseño y la deportividad. Nosotros no seguimos a las marcas, no nos encasillamos en los segmentos que ya existen. Nosotros vamos a definir los segmentos".