Con el perdón de Detroit, París y Tokio, pero Alemania siempre tuvo el mayor salón del automóvil del mundo. Si bien nació en Berlín en 1897, en el último medio siglo y más, Frankfurt fue el escaparate para todas las marcas del orbe, pero por sobre todo, una vitrina de la grandeza de la industria alemana con despliegues enormes de Mercedes-Benz, BMW, Audi, Volkswagen, Porsche y Opel.
Hoy, Frankfurt ya no existe y su reemplazo desde 2021, el IAA Mobility de Münich, no es ni la sombra de lo que fue aquél autoshow en su momento.
En la capital de Baviera no hay ningún fabricante de autos japonés exhibiendo, tampoco de Corea del Sur, ni de Estados Unidos. No se ven ni las narices de las marcas de Stellantis, uno de los mayores grupos del mundo. Están los alemanes, por cierto, pero bastante disminuidos, mostrando algunos conceptuales pero nungún modelo de gran volumen que nos entusiasme. Y están los chinos...
Sí, no son muchos, pero los fabricantes de automóviles chinos presentes en Münich están haciendo sentir su presencia con productos tan atrevidos, tecnológicos y deslumbrantes, que la propia prensa alemana dice que la industria local está en alerta.
Mercedes-Benz domina el centro del pabellón B3 del Messe Münich, pero un poco más atrás de la estrella cuelgan tres grandes letras: BYD, una marca que ya inició su despliegue global. El grupo está presente en algunos mercados de Europa, Alemania entre ellos, desde hace unos años, con cinco modelos eléctricos y ahora devela el sexto: el Seal U, una camioneta 100% eléctrica que viene a golpear a modelos del segmento mediano con el precio de un vehículo compacto.
No sólo eso, sino que deja un espacio para mostrar a Denza, una marca creada en China en asociación con Mercedes-Benz, que podría abrir sus alas en el mercado europeo en 2024.
También es impactante es la fuerza que muestra MG en el pabellón B2, justo detrás del Grupo Volkswagen. La firma de origen británico develó la versión definitiva del Cybester, un roadster eléctrico espectacular el diseño y en precio. Junto a él aparece un modelo que comienza a ser un éxito en Europa: el MG4.
Más allá, con menos nombre, se despliegan los que buscan su lugar en Europa: Leapmotor, Seres, SAIC, Hinqi y Xiaopeng Motors. Este año vinieron el doble de marcas chinas al Salón de Münich, comparado con lo que vimos en 2021. Eso es mucho.
Los autos eléctricos chinos siguen siendo una rareza en las carreteras alemanas, pero eso podría equilibrarse rápidamente por sus nuevas tecnologías y atractivos precios. Según el Centro de Gestión Automotriz, sólo circulan 1.448 BYD frente a 207.000 autos eléctricos de Volkswagen, una diferencia todavía grande, pero no imposible para el poderío de las marcas chinas.