Debido a que la tendencia es que los autos de alto desempeño sean eléctricos, Dodge no tiene más opción que dejar la tradición de crear muscle cars con motores V8 por más poderosos que sean.
Con la llegada de la nueva generación de ambos muscle cars, Dodge inicia su apuesta por la movilidad eléctrica, y contrario a lo que se pensaba, que a la par existirían versiones con motores de combustión interna, la oferta solo será emisiones cero.
Aunque todavía no existe una fecha exacta del debut de la nueva generación de Charger y Challenger, todo indica que en 2023 aparecerán los conceptos de ambos modelos, mientras que las versiones de producción masiva aparecerán para el siguiente año.
En su próxima generación, los muscle cars de Dodge dejan la gasolina, sin embargo, la cantidad de poder será superior al rondar los 900 hp. Este poder les permitirá hacer el 0 a 100 km/h por debajo de los 2.0 segundos. Por su parte, la autonomía promete superar los 800 kilómetros.
