Sea cual sea la razón, hay ocasiones en las que un automóvil llega a estar varios días estacionado, situación que puede acarrear problemas una vez que se desee mover.
Ya sea que se hayan hecho o no labores preventivas, la vuelta a la circulación hace obligatorio realizar algunas acciones básicas de mantenimiento del automóvil antes de volver a circular, poniendo atención especial a las llantas, ya que son pieza clave en la seguridad.
Aunque la presión del aire y el estado general son los dos puntos esenciales que se deben tomar en cuenta para mantener en estado óptimo los neumáticos del vehículo, no son los únicos.
A continuación, algunos de los aspectos que también se deben tener en cuenta:
Parches planos
Lo ideal hubiera sido mantener elevado el automóvil durante el largo periodo de inactividad para evitar que los neumáticos hayan soportado peso excesivo en la misma área, sin embargo, esta tarea puede resultar complicada o imposible para la mayoría.
Esta comprobado que tener un vehículo en la misma posición durante varios días puede hacer que se desarrollen parches planos, también conocidos como “flat spot”. Estas imperfecciones, que surgen en la banda de rodadura, pueden desequilibrar la rueda, provocando que vibre la dirección y afecte a la conducción en el momento que vuelva a circular.
Para evitar esta situación, siempre que sea posible, el vehículo debe moverse del sitio, aunque sea ligeramente. Con esos movimientos de forma regular, esos pequeños parches planos provocados tras unos días parados, generalmente, desaparecerán después de aproximadamente 40 kilómetros de conducción.
Presión
Aun cuando un vehículo está parado, se debe prestar atención a la presión de los neumáticos. Para mantenerlos siempre en el mejor estado, se deben inflar regularmente, utilizando como medida la presión máxima recomendada por el fabricante del vehículo.
Para llevar a cabo estas comprobaciones y ajustarlas en consecuencia, se debe usar un medidor de presión. Al verificar y ajustar sus presiones, también se debe asegurar que el neumático no tenga deformaciones, grietas u objetos alojados en la banda de rodadura. Si alguno de estos está presente, el neumático debe considerarse inseguro hasta que un profesional lo revise.
Factores medioambientales
Otro factor que puede influir en el estado de las llantas de un automóvil varado por días es el entorno en el que el ha estado estacionado, ya que el compuesto de goma incluso se ve afectado por el clima y la temperatura.
Es importante que la superficie sobre la cual está estacionado el vehículo esté firme, razonablemente nivelada, bien drenada y limpia. También es importante que los neumáticos no estén expuestos a temperaturas extremadamente altas o bajas durante un periodo largo.
Del mismo modo, no deberían dejarse continuamente expuestos a la luz solar directa o en superficies absorbentes de calor, como el asfalto negro.