Lamborghini presentó durante el Salón del Automóvil de Ginebra de 2005, una pieza de edición limitada que estaría destinada a sus más fieles seguidores, el Lamborghini Gallardo Concept S, un convertible basado en el exitoso Gallardo, del cual se planeaban fabricar 100 unidades, pero que al final jamás se llevó a líneas de producción debido a su alto costo de fabricación.
Al final, solo se ensamblaron dos ejemplares, el de desarrollo, y un modelo a escala sin motor que se encuentra en el museo de la marca, por lo que este fallido, pero ambicioso proyecto pareciera que solo quedará en el baúl de los recuerdos.
Aquí lo más llamativo era su extraña carrocería, y Lamborghini optó por colocar una gran viga en la parte central para separar las plazas delanteras, dos parabrisas, y ventanillas laterales específicas, además de reestructurar la ingeniería que tiene que ver directamente con la seguridad, para salvaguardar a los pasajeros. Si te lo estabas preguntando, no tiene ningún tipo de techo retráctil o toldo por lo que conducirlo bajo la lluvia podría resultar un verdadero dolor de cabeza.
Dentro del apartado mecánico emplea el tradicional V10 naturalmente aspirado de 5.0 litros de desplazamiento y una potencia de 520 caballos de fuerza, acoplado a una caja manual robotizada de siete cambios y sistema de tracción total.
No es la primera vez que este ejemplar es subastado, pues ya en dos ocasiones (2015 y 2017) se ha intentado poner a la venta, por lo que en esta ocasión será ofrecido nuevamente en un evento organizado por la casa de subastas RM Sotherby´s en los Emiratos árabes Unidos el próximo 30 de noviembre.
El precio rondaría los tres a cuatro millones de euros, tal y como se fijó en los eventos pasados, ¿crees que ahora sí, este raro y único ejemplar en el mundo pueda tener dueño? ¿O seguirá siendo el patito feo de la firma italiana?
