Ante su estrategia de electrificación de vehículos, Volkswagen Group tiene como principal objetivo al mercado más grande del mundo, tanto en la venta de autos convencionales como eléctricos, es decir, el chino. Teniendo en cuenta lo anterior, la compañía alemana ha iniciado la construcción en Anting, China, la primera fábrica creada específicamente para adoptar la plataforma MEB.
Una vez que llegue 2020, y que arranque la primera producción MEB a nivel mundial en Zwickau, Alemania, la planta situada en tierras asiáticas comenzará a ensamblar un SUV de Volkswagen, bajo un novedoso sistema de fabricación que tiene como punto medular la automatización y eficiencia.
Para ello, la planta con una superficie de 610.000 m, equipa más de 1,400 robots, así como una gama de tecnologías que incluyen Inteligencia Artificial, Realidad Aumentada y Realidad Virtual, creando así una planta de producción inteligente y digitalizada.
Igualmente, utiliza 27 tipos de tecnologías ecológicas con una especial atención en la preservación del agua, el ahorro de energía y la reducción de dióxido de carbono.
"A través de la plataforma MEB de Volkswagen, seremos capaces de producir fácilmente y a gran escala vehículo eléctricos de última generación para nuestros clientes. El Grupo Volkswagen, sus marcas y sus asociados de las joint venture chinas se focalizan de forma consistente en la movilidad sostenible y promueven la transformación de la industria automovilística en China y en todo el mundo. Así, enfatizamos la importancia del mercado chino para el Grupo Volkswagen", explicó Herbert Diess, Presidente del Comité Ejecutivo del Grupo Volkswagen.
Volkswagen tiene previsto que una vez que inicie operaciones, esta planta enfocada a vehículos eléctricos -SUVs de tamaño medio y grande, así como sistemas de baterías- tenga una capacidad de producción anual de 300,000 unidades por año.