Justo medio año después de que Lamborghini donara un Huracán al Papa Francisco, este emblemático y personalizado súper auto fue subastado en Mónaco por la casa RM Sotheby's.
Conforme a lo acordado al momento de donarlo al Pontífice, cada uno de los $954,936 dólares (18.7 millones de pesos mexicanos) por los que fue vendido el Huracán a Rent Car Deluxe, una empresa de renta de autos, serán destinados para la caridad. Del total de lo recaudado, el 70 por ciento será para la ciudad de Nineveh, Irak (una región atacada y asediado por ISIS), el 20 por ciento a dos ONG con proyectos en África -'Amici per il Centrafrica Onlus' y Groupe International Chirurgiens Amis de la Main, y el 10 por ciento restante a la Asociación Papa Juan XXIII.
Tomando como base un Huracán RWD Coupé, el ejemplar de este labor de beneficencia fue personalizado y fabricado conforme a las especificaciones del programa Ad Personam de Lamborghini. Visualmente, este deportivo destaca por la carrocería en color blanco -Bianco Monocerus- y las líneas amarillas -Giallo Tiberino- en homenaje a los colores de la bandera de la Ciudad del Vaticano, así como por los rines de 20 pulgadas. El toque final fue agregado por el propio Papa, quien firmó el capó del auto al verlo por primera vez.
Donde no hay variación alguna es en el motor, por lo que el V10 de 5.2 litros ofrece los mismos 610 hp y 413 libras-pie de torque, encaminados a las ruedas traseras por medio de la caja automática de siete velocidades. Este poder le permite ir de 0 a 100 km/h en 3.2 segundos y llegar a 325 km/h.