Antes de conocer este nuevo vehículo, vale la pena hurgar un poco en los orígenes de la marca Infiniti, que como todos sabemos es la línea de lujo de Nissan, y nace en 1989. La intención de Infiniti era la de competir en el mercado estadounidense inicialmente contra los constructores alemanes que se posicionaban rápidamente quitándole un buen trozo del jugoso mercado a los vehículos "Made in USA" y de mucha tradición, léase Cadillac y Lincoln, quienes confiados en su fama solamente hacían algunos “rebadges” de modelos de marcas generalistas de General Motors o Ford con el consabido enojo de sus clientes potenciales, que miraban como los BMW, Audi o Mercedes-Benz les daban más lujo, confort y tecnología por su dinero.
Infiniti siendo cuidadosa de el hecho que alejó a los compradores estadounidenses de sus marcas propias de lujo, se esmeró en siempre presentar innovaciones técnicas avanzadas, con diseños bien pensados que atrajeran a los compradores de autos de lujo, bueno después del la clase de historia vayamos a conocer el QX50 de nueva generación.
QX50 2019
Volamos a Los Ángeles para conocer y manejar de primera mano este vehículo, cuya primera generación se presentó en 2014, y estuvo disponible hasta 2017.
La segunda generación toma algunas de las líneas del vehículo concepto QX Sport Inspiration, presentado en el Salón de Detroit 2016, un año después en ese mismo salón se presenta el QX50 Concept, qué es básicamente el vehículo con las formas y líneas definitivas, pero para ver el modelo de producción hubo de esperar hasta el Salón de Los Angeles 2017, lugar en donde la marca develó la versión final.
Como podemos darnos cuenta se trata de un vehículo orientado al gusto latente de los consumidores por adquirir camionetas, o SUVs, o como el fabricante acota específicamente CUV (Crosover Utility Vehicle).
Las formas y dimensiones del XQ50 lo colocan en franca competencia con la renovada BMW X3 o a Audi Q5.
El tamaño
Las dimensiones son compactas, pero no pequeñas, con 4,694 mm para el largo total, una anchura de 1,902 mm. La altura es de 1,679 mm y por último la distancia entre ejes es de 2,799 mm.
Los interiores
Aquí se nota el arduo trabajo de la marca por mejorar a pasos agigantados, ya que la propuesta de ergonomía y la calidad de los materiales es óptima, incluso podríamos pensar que estamos en un vehículo de otra categoría y precio, solo hay que ser muy quisquilloso para encontrar diferencias en los enrases y en la alineación de partes, por ejemplo: los extremos del tablero con los paneles de las puertas. En general todo es de muy buena calidad, con el único mal sabor de boca que el transmisor / llave de presencia (transponder) necesario para abrirlo o ponerlo en marcha es igual al de un Sentra. ¡Cosas que siempre pasa por alto un constructor generalista!
En cuanto al sistema de Infoentretenimiento el conductor está informado por tres pantallas, la más pequeña localizada en el cuadro de instrumentos, flanqueada por los diales del tacómetro y velocímetro –que son con una configuración análoga- un par de pantallas de 7 y 8 pulgadas más se localizan en el centro del tablero, una debajo de la otra, y ambas son de accionamiento táctil –lo que puede llegar a ser un tanto cuanto confuso-, cuenta con los protocolos de comunicación habituales, es decir Bluetooth y USB, además ofrece Apple CarPlay y Android Auto. El sistesma de audio está firmado por BOSE y la calidad es realmente buena.
La mecánica
Este es el rubro en donde mayor novedad nos presenta el QX50, ya que bajo el cofre se encuentra un motor con una configuración realmente atrevida y propositiva.
Se trata de un propulsor de 2.0 litros, dotado de un turbocargador que entrega 268 hp, hasta aquí nada suena fuera de lo normal, lo interesante es que este motor puede variar la relación de compresión por si solo ¿Cómo lo logra? El proceso no es nada simple –ni de explicar ni de hacerlo funcionar- La tecnología de Compresión Variable que ofrece este motor es la primera vez que se ve en un desarrollo comercial, ya Saab había intentado algo similar en el año 2000 pero no pasó de un prototipo, ahora el QX50 ofrece la tecnología VC-T que puede variar de 8:1 de compresión a 14:1 con un mecanismo interno en el motor, se trata de la implementación de unas bielas articuladas, que están conectadas al cigüeñal, que no está alojado en la bancada de los cilindros, si no justo en medio del bloque, la conexión de las bielas es mediante una sofisticada pieza, que mediante un movimiento basculante, ayudado de un brazo de control puede modificar la carrera del pistón, por consiguiente modificar la relación de compresión, en el primer caso la relación como ya lo dijimos es de 8:1 es decir la mezcla Aire-combustible se comprime ocho veces en la cámara de combustión, justo en el momento que termina de comprimir (el pistón en el punto más alto dentro del cilindro) es cuando se enciende la chispa y la mezcla explota, lanzando al pistón vigorosamente hacia abajo, lo que nos da inercia para que el volante motor gire, la segunda fase nos entrega 14:1 de compresión (potencia, pero menor gasto de combustible, y menos emisiones de Co2).
Por si te lo preguntabas, así funciona el motor de compresión variable del @infinitimx #QX50 2019 pic.twitter.com/tanyCaZcFN
— Autocosmos México (@Autocosmos) 30 de enero de 2018
La explicación más clara sin entrar en rollos técnicos es muy simple, el funcionamiento del motor es comparable al desempeño de dos atletas corredores, el primero es comparable a un velocista de los 100 metros planos, que durante toda la carrera da el máximo, el segundo es similar a un corredor de fondo, de grandes distancias, cuyo desempeño es constante e incansable, pues así se comporta la compresión variable, cuando necesitamos mayor fuerza y agilidad, por ejemplo en arranques, la entrega es inmediata, si necesitamos una mayor constancia, por ejemplo en una carretera con promedios constantes y continuos la segunda fase de compresión se activará.
Con esta bivalencia de compresiones el 2.0 litros genera un 27% menos de emisiones contaminantes que un motor V6 de la misma potencia y rendimiento.
Ya probaremos el QX50, en nuestro país, y ya que hablamos de México es prudente comentar que este producto está fabricado en la planta que tiene la alianza Renault-Nissan y Daimler en el estado de Aguascalientes llamada COMPAS ( Cooperation Manufacturing Plant Aguascalientes)
Aun no tenemos los precios ni las versiones disponibles en nuestro país, lo que es un hecho es que la tendremos en los concesionarios de cara a la primavera del 2018.