Todo aquel visitante al Salón de Detroit 2018, no solo quedará sorprendido por las decenas de automóviles exhibidos -incluidos los más de 20 debuts mundiales-, sino también por un peculiar vehículo expuesto en la banqueta del acceso principal del centro de exposiciones de Detroit, Michigan en Estados Unidos.
Aunque a primera vista pareciera un truco más de la tecnología, una vez que estas deferente es posible admirar que se trata de un vehículo real, solamente que sufrió de un tratamiento bastante peculiar. Con el motivo del debut de la nueva generación del Clase G, Mercedes-Benz decidió hacerse publicidad por medio de un gigantesco cubo de resina color ámbar en el que su interior contiene a una Clase G 1979, es decir un ejemplar creado en el primer año de producción de este icónico utilitario.
Para lograr esta labor de encapsular al Clase G, los creadores de esta especia de obra de arte llamda "Stronger Than Time" requirieron de poco más de 44 toneladas de resina sintética. Queda claro que esta idea por demás creativa hace referencia al fenómeno natural de los insectos conservados en ámbar, y que en el caso de la SUV de Mercedes-Benz conserva la misma figura desde su aparición en hace casi 40 años.
Debido a que se trata de una Clase G 1979 real, el bloque de resina tiene unas dimensiones de 5.5 metros de largo, 2.55 metros de ancho y 3.1 metros de alto. Pese a que la tarea de encapsular este vehículo pareciera sencilla, esto es vaciar las toneladas del compuesto en un molde, el trabajo tomó mes y medio. Cada día, los artesanos de esta obra iban poniendo una cierta cantidad de resina ámbar sintético para que fuera secando y así creciendo cerca de 30 mm por jornada.
Después de su exhibición en el Salon de Detroit 2018, el paralelepípedo será llevado en los mercados donde sea lanzado la nueva generación del Clase G.
Una Mercedes-Benz Clase G conservada en resina