El grupo Fiat Chrysler (FCA) anunció recientemente en su cuenta de twitter que la planta ubicada en Saltillo, Coahuila, será destinada para producir nuevos vehículos de distribución global, mientras que la producción de las camionetas RAM Heavy Duty será trasladada a la planta de Warren en Michigan.
Esta nueva planta contará con una inversión de un mil millones de dólares para su modernización, suma que servirá para impulsar a la producción de la próxima generación de camionetas Ram. Esta mudanza, se tiene planeada comience en el año de 2020.
Es cierto que esta decisión se tomó en gran medida gracias a la aceptación de las nuevas reformas fiscales aprobadas por Trump, el pasado mes de diciembre, pero también estamos consientes que estos vehículos son mayormente comercializados en el norte del continente, lo cuál facilitaría la distribución de los mismos a su mercado de destino.
Debido a la expansión que tendrá la planta de Warren, se estima que se crearán alrededor de 2,500 puestos de trabajo, así como la implementación de bonos de productividad para los empleados más destacados, excluyendo a los directivos de alto rango. Dicho pago será el reconocimiento que realice FCA debido al alto compromiso de sus trabajadores por los éxitos que ha obtenido la compañía en los últimos años.
"Estos anuncios reflejan nuestro compromiso continuo con la huella de fabricación de EE. UU. Y los empleados dedicados que han contribuido al éxito de FCA", dijo Sergio Marchionne, director ejecutivo de FCA.
"Es justo que nuestros empleados compartan los ahorros generados por la reforma tributaria y reconozcamos abiertamente la mejora resultante en el entorno empresarial de EE. UU. Invirtiendo en nuestra huella industrial en consecuencia".
Cabe mencionar que dentro de los planes de dicha expansión se tiene como meta principal mejorar y aumentar las líneas de producción que engloban a los recientes productos de Jeep, que incluyen a los modelos como Jeep Wagoneer y Grand Wagoneer que serán lanzados en 2019.