Aunque en la actualidad Alfa Romeo no está presente como tal en la Fórmula 1, esta marca italiana tiene un linaje dentro del deporte motor desde su fundación hace más de 100 años. Sin duda la mejor época dentro del automovilismo de este fabricante, que en sus orígenes lleva el nombre Anonima Lombarda Fabbrica Automobili, fue en el Siglo XX, específicamente en la década de 1930, 1940 y 1950. Como muestra de esta superioridad en las pistas, los dos primeros campeonatos de la F1 -1950 y 1951- fueron la compañía italiana gracias a dos leyendas de las competencias: Giuseppe Farina y Juan Manuel Fangio. Otro dato más que habla de la casta de Alfa Romeo es que Enzo Ferrari participó como piloto de la escudería milanesa.
Con toda esta tradición dentro del automovilismo, ya sea como escudería o como proveedor de motores, Alfa Romeo ahora propiedad de FIAT Chrysler Automobiles continúa ofreciendo ese espíritu deportivo en cada uno de sus modelos. Al pertenecer al conglomerado de compañías italo-americanas, en la actualidad los modelos de esta firma funda en Milán, Italia, aprovechan todo el know-how de Ferrari. Es así que además del estilo elegante que caracterizan a los autos italianos siempre van acompañados de esa dosis de alto desempeño.
Teniendo en cuenta que los Alfa Romeo son automóviles dotados de poder y tecnología para ofrecer un alto performance que mejor lugar para comprobar las capacidades de toda la gama que el Autódromo Hermanos Rodríguez. Pero antes de entrar con los datos y la experiencia de manejo, no podemos dejar de mencionar que como buenos autos italianos, los “Alfa” son automóviles que atrapan con la imagen. Siguiendo los pasos de Ferrari la creación de sus vehículos parten del diseño, por lo que encontramos carrocerías dotadas de una imagen sumamente atractiva y, por supuesto, una gran aerodinámica.
Manos a la obra
Una vez atraídos con por la vista llegó el momento de rodar en el enigmático trazado de la Ciudad de México compuesto por un total de 4.3 kilómetros y un total de 14 curvas cada uno de los modelos que vende la marca italiana en nuestro país, es decir, el Mito, el Giulietta, el 4C y el Guilia. Lo interesante aquí es que además de existir una importante diferencia en tamaños, poder y configuración de carrocerías, cada uno de los autos entregan una sensación de manejo totalmente deportiva, obviamente que cada dentro de sus posibilidades. Así que, los Alfa Romeo además de ser vehículos atractivos ofrecen esa misma deportividad que podemos encontrar en marcas alemanas.
MiTo
A pesar que se trata del modelo más compacto y accesible de Alfa Romeo tiene todos los elementos necesarios para catalogarlo como un auténtico deportivo. De inicio lo que más llama la atención es que pesar de solo equipar un motor de baja cilindrada -1.4 litros- gracias al sistema de sobrealimentación entrega un total de 170 hp y mejor aun son las 184 libras-pie de torque. Partiendo de este poder y un peso de únicamente que ronda los 1,400 kilogramos, así como un sistema de suspensión rígido y frenos Brembo, este hatch tiene todo comportarse a la altura dentro de la pista. Para poner un poco más de emoción al volante y poder sacar más provecho al tren motor y rigidez del chasis, es posible entre tres modos de manejo -Dynamic, Natural y All Weather-. Durante las hot laps que estuvimos a bordo de este hatch y bajo el modo Dynamic, que básicamente es una modalidad Sport, pudimos comprobar como el control de tracción se activan de forma más discreta, el motor y los frenos son más veloces y reaccionan más rápido, y la dirección es más directa y deportiva. Por cierto, está ultima para ser un tracción delantera el vehículo no presenta torque steer.
Giulietta
Siguiendo con la armonía de deportividad y elegancia, este Giulietta ya lo podemos catalogar como un hot hatch al sobrepasar los 200 hp. Al igual que en el MiTo, hace un cuatro cilindros turbo es el encargado de generar esa dosis de deportividad básica en un Alfa Romeo. Sólo que al ser un 1.7 litros estamos hablando de 240 hp y 257 libras-pie de torque. Claro que al tener más poder y un diferencial autoblocante electrónico las cosas se ponen mucho más interesantes en la pista a bordo de este Made in Italy. Una vez más el selector de manejo nombrado por la marca como Alfa D.N.A. permite que la actuación del motor, frenos, dirección, transmisión -doble embrague seis velocidades-, suspensión y acelerador se adapten al estilo del conductor y las condiciones del camino. En este caso al estar en el Autódromo pudimos sacar el mejor provecho de toda la ingeniería y tecnología que cuenta este auto con un peso en la báscula de 1,742 kilogramos.
4C
Sin lugar a dudas este coupé es el automóvil que ofrece la sensación de manejo más pura de Alfa Romeo. Desde la manera de entrar al vehículo, la posición de manejo, la configuración del habitáculo, hasta la manera de elegir la marcha, nos hablan de un auto orientado netamente deportivo. Pero además de todo lo anterior, el Alfa D.N.A. además de contar con los tres modos de manejo antes mencionados agrega la modalidad Alfa Race que eleva mucho más la deportividad del vehículo. Y es que esta configuración, ideal para el circuito, desactiva el control de estabilidad y de tracción para entregar un manejo totalmente puro. Otro punto a destacar de este auto de tracción trasera es que a solo pesar 1,050 kilogramos -gracias al uso de fibra de carbono- y disponer de 240 hp, la relación peso/potencia -4kg/hp- es realmente extraordinaria. Para aquellos que buscan un manejo más audaz está disponible la versión Spider que elimina el techo.
Guilia
Este sedán además de ofrecer lujo y gran habitabilidad, es el más poderoso de su segmento cuando nos referimos a la versión Quadrifoglio. Pero para quienes no desean tanta energía está la variante “normal” que arroja 280 hp y 306 libras-pie de torque a las ruedas posteriores, una cifra realmente atractiva sobre todo cuando se trata de un cuatro cilindros de 2.0 litros. Aunado a lo anterior este Guilia tiene una distribución de peso casi perfecta -49:51-, la suspensión de aluminio y el sistema Torque Vectoring -sistema que controla la distribución de potencia-, lo que le permite alcanzar prestaciones dinámicas sobresalientes en la pista y un gran confort al rodar a bajas velocidades. Pero ¿qué pasa cuando la cantidad de caballos de este cuatro puertas sube a más de 500 hp? la respuesta es sencilla: supera a todos los sedanes de alto desempeño de su segmento. Una vez que lleva el sello Quadrifoglio este italiano queda en lo más alto -potencia, aceleración y velocidad máxima- al compararlo con el Mercedes-AMG C63, Cadillac ATS V-Series, Audi RS5 y BMW M3. Ya cuando un auto despega de 0 a 100 km/h en menos de cuatro segundos y supera los 300 km/h es que no se trata de un vehículo cualquiera, y es esta variante del Guilia no es la excepción. Aquí en lugar de usar un cuatro cilindros, un V6 twin-turbo de 505 hp y 443 libras-pie de torque acompañado de una caja automática de ocho cambios y una carrocería aerodinámica que combina aluminio, acero de alta resistencia y fibra de carbono forjan a un auto excitante. De la mano de todo este poder está el modo de manejo Race que otorga una respuesta inspirada en las carreras.