Los sistema de recuperación de energía cinética son comunes en los autos híbridos y eléctricos. Se basan en la energía que se pierde en desaceleraciones y frenadas, pero ésta no es la única forma en que el funcionamiento normal de un auto pierde energía, y es aquí donde aparece el nuevo sistema que está presentado Audi.
Denominada eROT y aún en fase de prototipo, esta tecnología recupera energía que usualmente se pierde en la suspensión de los vehículos. El sistema se basa en nuevos amortiguadores rotativos electromecánicos que reemplazan los tradicionales hidráulicos que se encuentran en prácticamente todos los sistemas de suspensión.
A través de un diagrama presentado por la propia marca, se ve que el brazo de soporte de la rueda trasera está conectado a una transmisión, que convierte la compresión y rebote del amortiguar en giros, y éstos en electricidad gracias a un alternador, el que envía esta energía a una batería de almacenamiento.
Por lo mismo, mientras más rota y deforme es la calle, más electricidad se puede generar. La marca indica que este sistema puede generar hasta 613 watts en calles rotas, la que una vez almacenada, se puede utilizar en un motor eléctrico de un auto híbirido, o en sistemas eléctricos en un auto convencional.
Este sistema, al igual que el i-ELOOP de Mazda, permiten mejorar la eficiencia en el uso de combustible. Pero no sólo eso, ya que al sustituir los tradicionales amortiguadores, se genera más espacio disponible en las cajuelas.
Audi no ha confirmado si esta tecnología está lista para ser usada en autos de producción, o si habrá que esperar hasta 2018, cuando aparezca su primer auto ciento por ciento eléctrico.