Con motivo del 50 aniversario de la victoria de Ford en las 24 Horas de Le Mans, RK Motors Charlotte se dio a la difícil labor de restaurar el Ford GT40 1966, negro con franjas plata con el chasis P / 1046 con el que Bruce McLaren y Chris Amon cruzaron la línea de meta. Vale la pena echarle un vistazo al auto que golpeó orgullo de Enzo Ferrari.
Para devolverle todo su esplendor, el GT40 fue sometido a una exhaustiva restauración que tomó 20 meses, en donde se invirtieron alrededor de cuatro mil horas de trabajo. El equipo comisionado a esta labor estudió detenidamente “miles de fotografías de la época” con el fin de garantizar la mayor fidelidad.
Incluso cuando no encontraban piezas raras o específicas, había que fabricarlas con las especificaciones de fábrica. En ese sentido destaca que tanto el parabrisas como el tubo de escape sean de manufactura artesanal.
Asimismo, el número “2” de las puertas fue pintado a mano y bajo el cofre de este clásico de carreras yace un V8 de 7.0 litros con 485 caballos de fuerza y 475 libras-pie de torque.
Por fortuna para Ford, en su regreso 50 años después, el GT dominó la categoría GTE PRO en la más reciente edición de las 24 Horas de Le Mans, por lo que la intención del homenaje se realizó con éxito. Por cierto, este año el modelo clásico estuvo presente en de la Sarthe para posar con su distinguito heredero.
¿Crees que el nuevo GT es un digno sucesor del mítico GT40?