De acuerdo a una investigación publicada en el American Journal of Epidemiology, de 1995 a 2010 el número de víctimas mortales ocasionadas por un accidente automovilístico registró su mayor descenso entre las personas que tienen mayor nivel de estudios. En cambio, la tasa de mortalidad entre las personas que tienen un nivel educativo inferior a secundaria ha ido aumentando año con año, e inclusive es superior a la media de EU.
Es importante tener en cuenta que estas cifras no indican que las personas con un título universitario sean mejores conductores. Más bien, los automovilistas con menos educación tienden a percibir menores ingresos, lo que propicia que posean vehículos más antiguos y con niveles de seguridad limitados.
En cifras, las personas que sólo tienen un certificado de secundaria tienen una tasa de mortalidad por accidente automovilístico de 7.5 muertes por cada 100 millones millas recorridas. Por su parte, las personas con un título universitario tienen una tasa de 2.5 muertes en el mismo recorrido.
Asimismo, esta investigación demuestra que las muertes por accidentes de tránsito en Estados Unidos han disminuido debido a que el gobierno continuamente incrementa las normas de seguridad y los vehículos integran más sistemas enfocados a salvaguardar la integridad de los ocupantes.