El Ferrari 250 GTO es uno de los más codiciados por los coleccionistas del mundo, sobre la belleza de sus líneas no hay la menor duda, un auto construido en la época de oro de los Ferrari Sport, al grado que consiguió –de una forma un tanto cuanto dudable- la homologación de FIA para competencia, las siglas GTO justamente significan Gran Turismo Omologatta, en italiano.
¿Qué hace tan especial al 250 GTO?
Lo primero es la situación de homologación, en donde se dice que Enzo Ferrari engañó a los revisores de la FIA, enseñándoles primero un lote de vehículos en una bodega y hábilmente, mientras el Commendatore invitó a comer a los funcionarios de la federación, los autos fueron cambiados de lugar, y al término de la mencionada comida el hábil Ferrari se trasladó a otra bodega, en donde previamente los autos habían sido movidos del primer recinto, es decir los revisores de la FIA vieron dos veces los mismos autos, pensando que eran otros.
Lo segundo es el origen del auto, el chasis utilizado por Giotto Bizarrini, quien empezó el proyecto fue el de un 250 GT SWB (Short Wheel Base) y le agregó un motor de 3.0l proveniente de un Testarossa, a mitad del proyecto Gioto Bizarrini se disgusta con Enzo Ferrari y deja el proyecto, el cual es retomado por Mauro Forgheri.
El diseño es obra de Sergio Scaglietti y originalmente el precio de venta era de $18 mil dólares y se produjo de 1962 a 1964, fabricando únicamente 36 unidades.
El 250 GTO, chasis 3851 GT recientemente subastado en $38,100,000 de dólares no ha sido el más alto, ya que en 2013 se vendió uno en $52,000,000, pero la operación fue entre particulares, entonces no hay un registro fidedigno del monto.
El club de los millones
Los Ferrari 250 GTO superaron la barrera del millón de dólares en 1986, en 1988 se subastó uno en $4,200,000 dólares, en 1989 un 250 GTO adquirido por un japonés llega a los 10 millones, en 1990 otro es subastado en 13 millones, en el Siglo XXl, en 2010 otro de los 36 250 GTO alcanza los 26 millones, en el 2012 se vende otro por 35 millones, en 2013 se vende entre particulares otro en 52 millones y por último el de la subasta de Bonhamns en el marco del Concurso de la Elegancia de Peeble Beach 2014 en California EE.UU.
El nuevo propietario es un italiano llamado Fabrizio Violati, que vive en Roma, ahora es miembro del selecto grupo poseedor de un Ferrari 250 GTO, haciéndole compañía a personajes de la talla de Ralph Lauren, Sam Walton, Carlos Hank Rhon, y Nick Mason (de Pink Floyd) por mencionar algunos.
Galería de Ferrari 250 GTO 1963 subastadoIr a la galería
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