Luego de presentar al mundo al nuevo Rey de los Muscle Cars, el Challenger Hellcat, era cuestión de tiempo para que Dodge trasplantara el absurdo V8 de 6.2 litros con 707 hp a su sedán de tracción posterior, el Charger que dicho sea de paso se renovó y se presentó en el pasado Salón de Nueva York.
El Charger SRT Hellcat se vale del mismo propulsor que entre otros datos entrega 650 lb-pie de torque, gracias al gigantesco súper cargador de 2,380cc. Evidentemente para manejar tal incremento de potencia, se han modificado varios componentes tales como: refuerzos en bloque, cabezas y metales internos, inyectores de mayor capacidad, así como una bomba de agua más grande, cigüeñal de acero forjado.
Otros sistemas que han recibido alteraciones son: Enfriamiento que incorpora dos intercoolers, radiador más grande, así como enfriadores para transmisión y aceite. La transmisión por su parte es una automática TorqueFlite HP90 de ocho velocidades que cuenta con modo manual, así como distintos programas de conducción: Custom (permite personalización de acuerdo al gusto del conductor), Default (Ofrece un balance entre comodidad y eficiencia), Eco (mejora la eficiencia de combustible, por ejemplo; arranca en segunda y limita las rpm), Sport (Mantiene sistemas de seguridad activados y permite disfrutar de una conducción dinámica y divertida) y Track (Libera toda la potencia del motor, abre una válvula secundaria para mejorar el sonido del motor, las asistencias electrónicas se vuelven mucho menos intrusivas y la caja permite llevar el motor hasta la zona roja del tacómetro).
El Charger Hellcat logra cuarto de milla se consigue en apenas 11 segundos, mientras que la velocidad máxima es de 330 km/h.
Tanto poder ha obligado a Dodge a montar el mejor sistema de frenos con el que cuenta, firmado por Brembo, emplea discos de 391mm con pinzas de seis pistones adelante, mientras que en el eje trasero los discos son de 370mm con mordazas de 4 pistones.
Adicionalmente este Charger Hellcat vendrá con un juego doble de llaves, destacando una de color rojo que libera toda la potencia del motor y permite activar las configuraciones de pista, así como el Launch Control. La llave de color negra libera solamente (si es que se puede calificar de poco) 500hp.
Visualmente encontramos cambios netamente orientados a mejorar el flujo de aire tanto al motor como a los frenos, las fascias tienen enormes tomas y el cofre de aluminio cuenta con salidas para dejar escapar el calor, así como una toma central.
Puertas adentro destaca el cluster de instrumentos con pantalla personalizable de 7 pulgadas, la consola central presenta nuevo diseño y alberga un gigantesco display táctil de 8.4 pulgadas desde donde podemos controlar prácticamente todas las funciones del auto. El equipo de audio está firmado por Harman/Kardon cuenta con 18 altavoces y es de 900 watts.
Dodge Charger SRT Hellcat 2015