Antecedentes
El Honda CR-Z (recién llegado a nuestro país) se presentó en forma de concepto en octubre de 2007 en el Salón de Tokio pero no vio la luz de la producción hasta 2010.
Tres años más tarde llega a nuestro país con una propuesta completamente diferente a lo que estamos acostumbrados en lo que a autos híbridos se refiere. Es un coupé de cuatro plazas en configuración 2+2 y una estética polarizada, ya que lo amas o lo odias.
Las siglas CR-Z vienen del inglés “Compact Renaissance Zero” y hacen alusión al subcompacto deportivo de finales de los 80, el CR-X.
Veamos qué tiene que ofrecer este nuevo híbrido que por cierto es el séptimo vehículo de este tipo en venderse en México.
Precio: $339,900 pesos (única versión).
Seguro: $12,508 pesos con Mapfre vía Autocompara de Santander
Características técnicas y mecánicas
Como comentábamos anteriormente, el Honda CR-Z 2013 es un híbrido, lo que significa que cuenta con dos fuentes de energía para moverse. El primero es un motor de cuatro cilindros 1.5L a gasolina que entrega 117 Hp a 6,600 rpm y 106 Lb-pie de torque. Éste se beneficia de la tecnología tradicional de la marca i-VTEC de apertura de válvulas variable para un mejor desempeño y consumo de combustible.
La segunda fuente de poder es un motor eléctrico de 20 Hp y 57 Lb-pie de torque que le suman potencia al de gasolina para entregar un total de 133 Hp y 125 lb-pie (la suma de las potencias y torques no es lineal).
Aunado al motor está la transmisión CVT –continuamente variable- que además puede emular velocidades engranadas y operarse desde las paletas de cambio colocadas detrás del volante.
La suspensión de McPherson adelante y de barra de torsión atrás mientras que los frenos son de discos ventilados para la parte frontal y de discos sólidos en la posterior, todos con ABS, EBD, control de asistencia de arranque en pendientes y VSA (control de tracción y estabilidad).
La dirección es de asistencia eléctrica.
Finalmente, en cuanto a seguridad se refiere, el CR-Z 2013 cuenta con cabeceras delanteras activas, cinturones de seguridad de tres puntos para las cuatro plazas, bolsas de aire frontales (x2), laterales (x2) y de cortina (x2); además de sistema de anclaje para silla de bebé LATCH.
Confort
El interior del Honda CR-Z da la impresión de estar a bordo de una nave espacial. Los botones (a la derecha e izquierda del volante), consola y pantallas de información están orientados hacia el conductor, dando la apariencia de una cabina de avión o como comentábamos, de nave espacial.
Las tapicerías son de tela (si me preguntan personalmente, mejor para un día caluroso) y los materiales utilizados para el tablero y en general para todo el interior son de muy buena calidad, suaves al tacto y con un ensamble que sin duda durará sin provocar ruidos con el tiempo.
El nivel de equipamiento es muy bueno pues es una sola versión. Cuenta con faros de xenón de alta intensidad (HID) de encendido automático, luces de conducción diurna de LEDs, faros de niebla, luces traseras de LED, sistema de control de clima automático, cristales y espejos eléctricos, control de velocidad crucero, contacto de 12V, controles de audio en el volante, guantera con sistema de enfriamiento, sistema de audio AM/FM/CD/MP3 con seis bocinas y entradas auxiliar de audio y USB.
El único problema que nos encontramos al probar el CR-Z 2013 fue la amplitud interior que si bien es suficiente para las plazas delanteras, atrás el toldo es muy bajo y el espacio para las piernas es casi inexistente, haciéndolo ideal sólo para una pareja con hijos pequeños.
Manejo
Lo primero que tuvimos que entender del Honda CR-Z 2013 es que no es un auto deportivo, sino un híbrido coupé con un manejo más divertido. Una vez que entiendes eso, es que comienzas a disfrutar más de este pequeño auto.
El motor no es precisamente muy potente, pero cumple y la transmisión CVT tampoco es muy emocionante. Sin embargo la dirección muy corta y el arranque rápido al empezar a moverse lo hacen un auto divertido de manejar.
Como todo auto híbrido, el CR-Z cuenta con un juego de baterías que se alimenta de energía del motor (además de recuperar una parte de la energía de los frenos) y que se descarga al utilizar el motor eléctrico. Al ser un híbrido en serie, significa que ambas fuentes de poder trabajan al mismo tiempo y nunca por separado como en otros híbridos en los que se puede circular utilizando únicamente la potencia del motor eléctrico. Entonces, el motor eléctrico únicamente funciona para ayudar al de gasolina cuando se requiere de más potencia.
El CR-Z tiene una función de Sport Plus en la que el conductor tiene que presionar un botón rojo en el volante para que la computadora haga entregar toda la potencia del motor eléctrico, al igual de la del de gasolina, cumpliendo con una función que podríamos calificar como “push to pass”, ideal para una situación de rebase en carretera.
El consumo de combustible fue bastante contenido, sobre todo que a veces abusábamos del famoso botón de Sport Plus para obtener más potencia.
Conclusión
El Honda CR-Z 2013 es uno de los autos más divertidos que últimamente hemos tenido oportunidad de probar. Luce diferente a todo lo demás en la calle, con el tinte deportivo que sólo un coupé puede entregar. Como dijimos en un principio no es un auto 100% deportivo, sino uno que simplemente te hace sonreír al manejar y que hace los trayectos citadinos más entretenidos.
No podemos ignorar el hecho de que es ridículamente pequeño en los asientos traseros, esto es algo que impedirá que sea un auto familiar. Pero para quien no necesita utilizar las plazas traseras, puede ser una interesante opción ya que aunque cuesta más de $300,000 pesos, al ser híbrido no pagará tenencia.
Algo que resultaría interesante es la opción de una transmisión manual que sí se ofrece en Europa y que lo convierte en el único híbrido con transmisión manual.