Mazda ha anunciado el incremento en su línea de producción del CX-5 que actualmente fabrica 200,000 unidades a 240,000 por año.
Esto lo logrará aumentando la capacidad de sus plantas en Ujina, Japón y al mismo tiempo servirá para incrementar la producción de nueva generación de motores Skyactiv. Esta iniciativa fue tomada por la buena aceptación que está teniendo el CX-5 en todo el mundo y además porque es el primer modelo en incorporar dichos propulsores.
Desde que se empezó a vender en febrero pasado, Mazda ha recibido órdenes que sobrepasan las estimaciones iniciales, por lo que actualizó su meta de ventas anuales de 160,000 a 190,000 para el año fiscal 2012.
En lo que respecta a los motores Skyactiv aumentará de 400,000 unidades a 800,000 anuales en octubre de este año. Los propulsores que se fabrican son de gasolina y diesel. Además del CX-5, estas máquinas serán instaladas en el nuevo Mazda 6, el cual será presentado posteriormente.
Mazda pretende vender 1,700,000 unidades mundialmente al terminar el año fiscal en marzo del 2016.