En los últimos meses, el mercado de autos nuevos en México ha sido bombardeado por nuevos productos en la parte más baja de la tabla de precios. Ford, Nissan y Chevrolet, quienes además de ser de los más grandes son quienes han presentado sus apuestas para dominar este segmento.
Por un lado está Nissan, con el March. Un producto que se fabrica en territorio nacional (en la planta de Aguascalientes, Aguascalientes) el cual es la siguiente generación del Micra y que promete buen confort, potencia y espacio interior para cautivar a los clientes. El March, además cuenta con el respaldo de la marca que controla la cuarta parte del mercado de autos nuevos en México lo que le dará una buena reputación y la aceptación por sentada de gran parte de quienes buscan un producto confiable y económico.
Por su parte, Ford, ha apostado por revivir un producto que dejó de venderse en nuestro mercado en 2009, el Ford Fiesta Hatchback de quinta generación, pero a diferencia de los modelos que llegaron previamente, éste proviene de India y no de Brasil, donde su calidad de interiores, ensamble y diseño le ha ganado reconocimientos importantes en la región.
Finalmente está el producto de Chevrolet, el Spark, que en realidad fue desarrollado por su división coreana (GM Corea). Éste es la siguiente generación del Matiz (que primero se vendió como Pontiac y posteriormente como Chevrolet) pero en nuestro mercado, ambos conviven para satisfacer a diferentes áreas de precios dentro del segmento de los subcompactos.
Precios:
Chevrolet Spark: de $114,100 a $144,900 pesos
Nissan March: de $116,900 a $160,900 pesos
Ford Ikon hatchback: N/D
Diseño
Siendo la parte baja del mercado de los subcompactos, es muy probable que encontremos muchos otros vehículos iguales, así que el auto que logre mantener una identidad propia lo suficientemente atractiva como para aún así hacerle destacar del resto, será el ganador.
Comenzando por el Ford Ikon, podemos decir que hicieron un gran trabajo al rediseñar por completo el frente -como lo comentamos en nuestra prueba inclusive parece un pequeño Focus RS, con una gran toma de aire en la parte baja, faros rasgados y una parrilla más delgada. Desgraciadamente no podemos decir lo mismo de la parte trasera ya que aunque no luce mal, es demasiado parecida a la del Fiesta de generación anterior y nos hubiera gustado que transmitiera la misma sensación de renovación profunda que el frente.
El Nissan March es definitivamente el más conservador en este aspecto, ya que no cuenta con líneas que destaquen por ser atrevidas o faros exageradamente largos como los del Spark ni colores para la carrocería que llamen mucho la atención. De hecho, el March no parece tan nuevo si lo comparas contra sus competidores, algo que se puede tomar como algo bueno o también como punto negativo dependiendo de lo que se esté buscando. Lo que sí es cierto, es que para un mercado joven el diseño del Nissan pasará demasiado desapercibido, inclusive con el kit aerodinámico de la versión RS.
Por último, está nuestro ganador definitivo en este rubro, el Chevrolet Spark, pues aunque el diseño pueda resultar para algunos demasiado poco fuera de lo común, logra un balance entre lo atractivo, moderno y sobre todo, que las pequeñas dimensiones del auto no arruinen el exterior al hacerlo aburrido.
Interior
Al hablar de autos accesibles, es difícil encontrar uno que tenga un ensamble o plásticos de buena calidad pues los costos de producción son los primeros en elevar el precio final del vehículo. Así que un balance entre sencillez y calidad es la clave para destacar de entre los demás subcompactos.
Comenzando por el producto de Nissan, el March, la sencillez de la plataforma V y de su línea de producción se notan dentro de la cabina pues no existen muchos elementos dentro de ella. El lenguaje de diseño formado por líneas curvas que vemos en el exterior, también se aplica para adentro. El tablero cuenta con un buen diseño, al igual que el módulo donde encontramos el estéreo y los controles del aire acondicionado pero los plásticos que los forran, son brillosos y duros en algunas partes, además de que al inspeccionarlo de cerca, encontramos algunas imperfecciones de fabricación como las rebabas.
En materia de equipamiento, el March cuenta con cristales eléctricos para las cuatro puertas en su versión más equipada mientras los otros dos sólo para las delanteras y en cuanto a espacio para todas las plazas es éste el que más espacio ofrece. En la parte negativa, podemos decir que el espacio de la cajuela sí se vio afectado al donar un poco para las personas que viajan en la banca trasera y que el sistema de sonido sólo ofrece entrada auxiliar y reproductor de CD MP3.
El renovado producto de Ford (Ikon hatchback) se nota mejor ensamblado y con materiales de mayor calidad que su antecesor procedente de Brasil. Los plásticos son suaves al tacto y no presenta ruidos por flexión o por que alguna pieza se haya aflojado por el uso. El diseño del tablero y de los paneles de las puertas es una actualización del que utilizaba el Fiesta y algunos detalles como el volante, son completamente idénticos.
Aunque el módulo del estéreo se nota anticuado de diseño, en realidad está bastante bien actualizado pues encontramos desde entrada USB y auxiliar hasta reproductor de CD MP3 en la versión tope. Además, también encontramos cristales eléctricos (para las plazas delanteras) y aire acondicionado manual.
El Chevrolet Spark es también el que cuenta con los mejores interiores tanto en diseño (muy vanguardista y juvenil) como en calidad de plásticos y ensamble. Los detalles como el tablero que deja a un lado la forma convencional y monta uno con forma de tablero de motocicleta definitivamente le da un toque distintivo que se agradece.
El sistema de sonido incluye entrada Mini-USB (alqo que no le vemos de mucha utilidad) y reproductor de CD MP3 al igual que sus dos compatidores. El espacio en el Spark está muy bien aprovechado pues aunque no cuenta con una cajuela muy grande, el balance entre el espacio para los ocupantes de la banca trasera y la cajuela es el mejor de los tres.
Manejo
Los tres modelos que estamos comparando utilizan motores de cuatro cilindros que les dan un buen consumo de combustible pero que gracias a su variación de cilindrada y tecnología, cambia entre uno y otro.
El más pequeño de los tres es el que utiliza el Chevrolet Spark con 1.2L de capacidad con 80 Hp de fuerza y 82 Lb-pie de torque, lo que habla de un motor bien balanceado. El manejo es alegre, aunque no romperás ningún récord de velocidad o aceleración a bordo de él, pero sin duda la sensación que transmite es la de un auto con más potencia y tanto la dirección como la suspensión están puestas a punto para ofrecer un manejo divertido y a la vez relajado en la ciudad. La única transmisión disponible en el Spark es una manual de cinco relaciones.
El Ford, también resulta bastante divertido tras el volante, el motor de 1.6L y 98 Hp no se siente especialmente potente como lo hace el del Nissan March. La transmisión también es manual de cinco y en carretera se llega a necesitar una marcha más, con la que no cuenta, para permitirle al motor descansar pero fuera de esto, los recorridos de la misma son precisos y bien balanceados.
En este aspecto, el March es el producto superior, pues además aunque el motor es también de 1.6L como en el Ikon, en el japonés produce 106 Hp y 105Lb-Pie de torque, que si además le sumamos el bajo peso del vehículo de apenas 960 Kg obtenemos, por mucho al más veloz de los tres. La suspensión también ofrece buenos niveles de confort y la dirección cuyo radio de giro es excelente, también se percibe corto para un manejo más preciso en carretera. Además de todo, el Nissan March es el único que cuenta con la opción de una transmisión automática, algo que definitivamente lo pone en ventaja.
Consumo de combustible
Aunque las cifras de consumo de combustible que los fabricantes prometen son prácticamente imposibles de lograr en un manejo cotidiano, sí son una referencia importante. En nuestras tres pruebas no obtuvimos las mismas cifras, pero en algunos casos sí se acercaron a lo que nos prometieron.
Para el Ford Ikon 2012 aun no existen cifras oficiales de consumo, pero según nuestras pruebas, obtuvimos un promedio de 15 Km/l, algo bastante respetable para un vehículo de su tipo.
El March promete un consumo en ciudad de 17 Km/l y de 20 Km/l en carretera pero nuestras cifras nunca llegaron a estos números pues en un uso combinado, apenas obtuvimos 14 Km/l. Esto se debe a que aunque el motor cuenta con buena potencia, la relación de la transmisión está muy larga, provocando que cambies más hacia abajo para poder mantener una promedio de velocidad más decente, consumiendo más gasolina. Además esto también tiene una gran desventaja en la ciudad ya que necesitas acelerar por más tiempo. Esto último funciona en mercados donde no hay muchas subidas y bajadas, pero en el nuestro no tanto.
El Spark, por su parte, ofrece 20 Km/l los cuales nunca obtuvimos, pero sí llegamos a unos muy respetables 17Km/l en uso combinado lo cual lo convierte en el ganador en este rubro.
Conclusión
El Ford Ikon podría ser nuestro ganador, pero el hecho de que la parte trasera sea prácticamente igual que el Fiesta extinto, que no cuente con una transmisión automática y sobre todo que no ofrezca ni siquiera como opción un sistema ABS (sí cuenta con bolsas de aire frontales) no lo ha permitido.
Si necesitas un auto con transmisión automática, no hay más opción que el Nissan March y no sólo porque sus competidores no la ofrezcan sino también porque es un auto bien balanceado, con excelente espacio interior y aunque el diseño no es el más vanguardista, luce bien y atractivo. Lo único que nos hace dudar sobre el March es la calidad del interior ya que los plásticos no son los mejores y creemos que el Chevrolet Spark sí ha marcado las nuevas reglas, haciendo un trabajao mejor. Eso, y que tampoco ofrezca ABS.
Tomando en cuenta todos los aspectos anteriores, llegamos a la conclusión que el auto mejor balanceado entre costo, calidad, manejo, potencia, tecnología y seguridad es el Chevrolet Spark. Aunque su motor es el más pequeño y de menor potencia, el manejo es extraordinario y muy divertido, además es práctico y con buen espacio interior. Los materiales también establecen un nuevo estándar en el segmento al igual que el ensamble de las piezas, probando que sí es posible tener un producto de buena calidad a un precio bastante accesible.
Lo más importante, sin duda alguna es la seguridad pues mientras sus competidores se concentran en la seguridad activa (bolsas de aire) y la pasiva la dejan a un lado (sistemas como el ABS), en el Spark encontramos ambas conviviendo en el mismo producto y con un precio que no se despega de las versiones más equipadas de ambos.
No es que digamos que el Nissan March o el Ford Ikon no sea buenos productos, porque sí lo son, pero tomando en cuenta todo lo demás, consideramos que el Spark es uno más redondo y que abraca más que los otros dos.