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Porsche 928 regresa al año 2000 por Daniel Arsham y The Kyza

El Nebula 928 ya tiene la bendición de Porsche y es una carta de amor a la estética Y2K de principios de milenio.

Porsche 928 regresa al año 2000 por Daniel Arsham y The Kyza

Y2K significa "Year 2000". Es una terminología del mundo informático usada a fines de la década de los noventa y a principios de nuevo milenio. Claro que luego, se tomó este código para hacer referencia de todas las tendencias estéticas que formaron parte de aquellos tiempos.

El universo Y2K es una capsula futurista de elementos estilísticos que se formaron a partir de los adelantos tecnológicos y el momento cultural que por entonces vivíamos. Puedo enumerar muchas cosas, como los lentes Oakley tipo mosca, Windows XP, el iMac, reproductores digitales de música como el Discman o un MP3 portátil, gráficas en 3D en mundos líquidos o alienígenas, gadgets fabricados en plásticos traslucidos, colores como el blanco en contraste con azules, morados y tonos neón, transparencias, música electrónica más rápida, diseños redondeados y fluidos, efectos cromados, etc.

Más fácil es que visites la cuenta de instagram del Instituto Y2K para que recuerdes viejos tiempos y para que sepas un poco de donde viene la inspiración del Nebula 928, la espectacular creación del artista Daniel Arsham, en colaboración con The Kyza (si te gustan los autos, creo que no tengo que presentártelo).

En palabras de Khyzyl "The Kyza" Saleem:

"¿El brief? Reimaginar al Porsche 928 de 1978 como una obra de arte nacida a principios de los 2000. Ayudé a rediseñar elementos del exterior como los parachoques, el spoiler trasero, los espejos y los focos del auto usando formas orgánicas inspiradas en las metaball como principal inspiración para las entradas de aire y luces, además de incluir elementos del 996 como el spoiler trasero.

Combinando los propios conceptos de Arsham basados en los viajes en el tiempo y el legado histórico de Porsche, el Nebula 928 logra mezclar tendencias del pasado, presente y futuro en una sola obra automotriz.

El exterior del auto fue pintado en un tono rosado iridescente, reminiscente del Rojo Cassis metalizado o del Frozen Berry metalizado, ambos colores de la paleta Porsche y que representan tonos prevalescientes durante la era Y2K. Otro guiño a la historia Porsche, lo encontramos en los rines, donde hay elementos de la llanta conceptual Panamericana, donde los elementos sobrepuestos complementan las formas redodneadas del resto del auto."

El interior sigue las temáticas del exterior incluyendo un pomo de diseño orgánico en color aluminio, al igual que el diseño del volante y los insertos de la consola. El resto fue tapizado en cuero y gamuza sintética (Ultrasuede) de color morado, más insertos en tela tejida de diseño futurista, aportadas por Borre Akkersdijk.

El auto ya tiene la "bendición" de Porsche y está siendo exhibido en la reconocida convención cultural SXSW, justamente en la exposición de la propia marca alemana.

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