Pocas cosas son tan destructivas y/o tan poderosas como las aguas y los vientos que puede desatar un huracán, por lo que la seguridad es la prioridad número uno ante un evento natural como este.
Una vez que un huracán se avecina o toca tierra, es importante proteger nuestra integridad, así como el hogar donde vivimos y el automóvil. Ante esta situación, lo mejor es seguir estos 10 consejos de seguridad.
1. ¡Nunca conducir en las inundaciones! Incluso si cree que conoce el camino en el que está viajando por muchos años de uso: ¡No lo haga! Menos de un pie de agua puede inutilizar un vehículo. Una vez que el vehículo está detenido, la corriente subterránea del agua que se mueve rápidamente es suficiente para tomar fácilmente el control del vehículo y moverlo.
Asimismo, el agua que ingresa a la entrada de aire de un vehículo en una carretera inundada se succiona al motor, lo que provoca que el vehículo se detenga inmediatamente y quede varado. Algunos fabricantes colocan los importantes módulos de control electrónico o cerebros debajo de los asientos traseros. Si el agua ingresa al interior del vehículo, la electrónica puede fallar de inmediato y quedará atascado.
2. Asegurarse de que su vehículo esté cargado de combustible y llevar un par de bidones adicionales de gasolina o diesel a bordo. Nunca deje que su vehículo se siente y permanezca inactivo en un charco de agua que llega al sistema de escape, ya que puede permitir que los vapores concentrados entren al compartimiento de pasajeros. Y recuerde, no son los olores que se pueden oler los que son peligrosos, son los que no se pueden oler.
3. Estacionar el vehículo en un área bien cubierta como un garaje en su casa o un estacionamiento. ¡Nunca estacionar debajo de árboles o líneas eléctricas por razones obvias!
4. Asegúrese de que todos sus documentos, como el registro, la prueba del seguro, etc. estén sellados en una bolsa impermeable con cierre hermético.
5. Antes de que llegue la tormenta, verificar que todos los niveles de líquido sean buenos en su vehículo y, lo más importante, que los limpiaparabrisas estén limpiando el parabrisas correctamente y que no estén rayados porque están viejos y gastados.
6. Antes de que llegue la tormenta, asegúrese de que todas las presiones de los neumáticos estén ajustadas correctamente. Esto juega un papel importante en la capacidad de los neumáticos de su vehículo para desplazar el agua de los patrones de la banda de rodadura en carreteras mojadas y proporciona un manejo óptimo en estas condiciones.
7. Cerciorarse de que el vehículo esté equipado con un kit de primeros auxilios y mantener la ropa seca en el maletero. Incluir algo de dinero en una bolsa impermeable con cierre hermético y un cargador de teléfono de repuesto.
8. Si el vehículo se va a dejar afuera, use cinta adhesiva y haga un patrón de estilo cruzado en todas las ventanas para protegerse si está en el vehículo y las ventanas se rompan.
9. Tomar fotos del vehículo antes de la tormenta para que, en caso de que ocurra algún daño, no tenga pruebas de su compañía de seguros.
10. Si el instinto dice no manejar, ¡No lo haga! No hay nada que valga la pena arriesgar su vida o la vida de los demás. La tormenta pasará y pronto volverá a salir.