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Prueba de Manejo

Audi Q8 2019, primer contacto desde Chile

La firma alemana eligió los desérticos parajes chilenos para el lanzamiento mundial de la Audi Q8 y nosotros estuvimos ahí.

Audi Q8 2019, primer contacto desde Chile

San Pedro de Atacama, Calama, en Chile y su desértica pero erosionada geografía fue el escenario escogido por Audi para presentar al mundo la Q8 2019, su más reciente SUV, que se considerará, el tope de gama en la familia Q de Audi. La Q8, no solo es ambiciosa por su propuesta pasional, sino por el factor diferenciador que utiliza ante sus rivales y compañeros de plataforma, la alta tecnología. Y finalmente, algo que muchos de ustedes ya notarán: hay cambios importantes en diseño, tanto en el interior como en el exterior, lo que habla de que Audi está tomando nota y quiere innovar un poco con su lenguaje de diseño.

La Q8 se emplaza sobre la plataforma MLB que le da vida a Q7, la SUV familiar de Audi, pero también a otros modelos del grupo, incluyendo a Volkswagen Touareg, la excelente Porsche Cayenne, o a la lujosa Bentley Bentayga, así como el bestial Lamborghini Urus. Usando este esquema, Audi persigue que Q8 se pueda insertar como un rival conceptual para BMW X6 y Mercedes Benz GLE Coupé, pero también de otros modelos con prestaciones más deportivas (como Jaguar F-Pace) y, aun así, no perder lo práctico. ¿Lo logra? ¿Tiene lo que se necesita para ser realmente deportivo y utilitario a la vez? Afortunadamente pudimos echarle mano en diversas condiciones y conocerlo antes de que debute en el mercado.

 

Diseño y dimensiones

Con 4,986 mm de largo, 1,995 mm de ancho, 1,705 mm de alto y 3 metros entre ejes, no podemos decir que Q8 es una SUV pequeña. De hecho, apenas es 66 mm más corta que Q7. Es marginalmente más grande que una X6, pero después de subirnos sentimos que el espacio está mucho mejor aprovechado. Con 605 litros de capacidad en la cajuela también supera a la BMW en 25 litros. De proporciones, en las fotos se ve enorme, pero la verdad se percibe algo más pequeña y ligera (guardando las proporciones, para que no nos linchen después, sabemos que es un auto grande) que sus rivales.

En esto ayuda mucho el diseño sólido, con muchos pliegues planos y líneas solidas que le otorgan firmeza y limpieza, en lugar de formas muy curvas y orgánicas. En frente, la nueva parrilla Singleframe, mucho más prominente, de forma octogonal y de silueta ancha se hace protagonista y domina  el frente del modelo, siempre que pidas la parrilla en un color contrastante. En nuestra unidad, de color blanco, el marco usaba el mismo color, por lo que perdía un poco de fuerza. Los faros en forma de L logran solucionar un poco esta tendencia donde los proyectores principales quedan abajo de las luces LED de uso diurno. Aquí se configura lo mismo, pero en una sola pieza, claramente con uso de matriz LED inteligente o Laser, segun opción. Flanqueando la parrilla, abajo, hay dos grandes tomas de aire, que en los modelos diésel son solamente estéticas, mientras que en el modelo a gasolina oculta un par de radiadores extra.

Marc Liche, diseñador en jefe de Audi, se inspiró en el Audi quattro original para dotar a Q8 de algunos rasgos deportivos. Y si bien no hay mucho que sea aparente a primera vista, el pilar C, de diseño trapezoidal, nos lleva un poco al mítico coupé de rally. La caída del techo es más pronunciada en parte trasera que en el techo, lo que resuelve un poco los defectos de X6, en tener poco espacio para la cabeza atrás y una zona muy claustrofóbica. Aun así, Audi logra un coeficiente aerodinámico de 0.34 cd, lo que no es para nada malo. Finalmente, atrás, las calaveras en carcasas tridimensionales y un listón negro (apostamos a que será el nuevo cliché de la industria) que une a ambas piezas, completa un look moderno y refrescante. Ah, y como novedad, la Q8 lleva puertas sin marco, otro detalle singular.

Interior

Afortunadamente para nosotros, el mismísimo Mauricio Monteiro Dos Santos, Diseñador en Jefe de Interior para Audi y el proyecto Q8, estuvo con nosotros, donde nos recalcaba que muy importante es buscar que el interior se corresponda con el exterior. Y así lo vemos, en especial con esta disposición completamente horizontal que marca mucho el ancho de la SUV, tal como el listón negro. Una gran consola en acabado piano ayuda a ocultar una de las dos pantallas del sistema MMi, con 10.1 pulgadas, mientras que la segunda, de 8.6 se encuentra más abajo, imitando un poco la idea que ya vimos en la Range Rover Velar. No te preocupes, que también hay una tercera pantalla y que conocemos bastante bien, del Audi Virtual Cockpit, con todos los instrumentos de conducción, como siempre muy personalizables y legibles a nuestro gusto.

Nos gusta mucho como Audi se ha logrado reinventar en el interior, respetando esta vibra de "lujo moderno" con muchos tonos monocromaticos y texturas sobrias, como aluminio texturizado o maderas grises opacas, así como bordes metalizados y costuras visibles en todo lo que lleva cuero. Si notas un parecido con el A8, es porque la mayor inspiración para este interior fue dicho modelo, incluyendo las dobles pantallas y mucho de su nutrido equipamiento, pero claramente, adecuado a un todo-caminos.

Las plazas traseras son desplazables y reclinables, además de que cuentan con comandos propios para la climatización y airbags laterales propios.

El sistema de audio corre por cuenta de Bang & Olufsen, con una selección de parlantes que tienen sus propios encastres acústicos dentro de las puertas, lo que mejora notablemente la fidelidad y proyección.

MMI

Hemos dicho en otras ocasiones que tanta pantalla distrae, pero lo que ayuda mucho en la Q8, es que la interfaz es oscura e imita controles más minimalistas y lógicos de usar, en lugar de un wallpaper tipo PC. Lo segundo, es que estas pantallas cuentan con feedback háptico y acústico, lo que ayuda a "imitar" la sensación de que estamos tocando un botón (como el botón del iPhone 7). Y finalmente, la usabilidad del sistema, en algunos casos se asemeja a la de nuestros propios dispositivos, por lo que todo se facilita aún más.

La pantalla superior nos muestra la cámara de retroceso, el audio, las conexiones, configuraciones y reglajes varios. La inferior es para el climatizador y para ofrecer algunos accesos directos a funciones como el control de descenso, desactivar el modo Start/Stop, activa el Head-Up display y otros. Los únicos botones físicos son el del encendido, el del Park Assist, la perilla del volumen y un practico botón de acceso directo a todas las asistencias del auto, muy conveniente, en lugar de ir tras "el menú del menú".

Claro que lo más importante es que puedes personalizar los iconos del sistema multimedia y de los accesos directos según tu conveniencia. El sistema GPS es inteligente y mejorará las sugerencias del recorrido según las vías que más frecuentas. Luego, puedes manejar todo mediante comandos por voz, los cuales se podrán ir actualizando vía internet (tiene una entrada para tarjeta SIM, soporta red LTE). De hecho, lo más notable es que no necesitas hablarle como robot al Q8. Solo te basta decir, por ejemplo, "tengo frio" para que el Audi te sugiera elevar la temperatura del habitáculo, sea con su climatizador de cuatro zonas, con el calefactor de volante o con los asientos climatizados (que también son eléctricos y tienen muy buenos masajes).

Para completar, la pantalla inferior reconoce escritura, por lo que puedes escribir un nombre con tu dedo y el sistema lo descifrará. Escribimos lo más mal que pudimos (como doctor de farmacias similares) y aun así, el Q8 pudo con nuestros geroglíficos . 

Motor

Audi señala que la Q8 debutará con un motor V6 3.0 TDi de 286 Hp y 443 lb-pie, al cual se sumarian dos propulsores más, un diésel de menor especificación y un motor a gasolina TFSI. Este último, es un sofisticado V6 de 3.0 litros, con 335 Hp y 369 lb-pie de torque. Precisamente este motor fue el protagonista de nuestra prueba, asociado a una caja Tiptronic de 8 velocidades, sistema quattro de tracción integral, 7 modos de manejo, suspensión neumática regulable y dirección a las cuatro ruedas.

Todos los motores están asociados a un sistema MHEV (semi-hibrido) de 48v, el que permite tener funciones de Start/Stop más avanzadas. Incluso puede apagar el motor por 40 segundos cuando sueltas el acelerador dejarte llevar por la inercia, lo que permite ahorrar bastante. El encendido, ni se nota. Este sistema también es el que alimenta a la dirección trasera, mejorando el radio de giro en baja velocidad (esencial en una SUV de 5 metros de largo) y mejorando la estabilidad lateral a mayor velocidad (especialmente si consideramos su peso de 2.1 toneladas, aun con muchísimo uso de aluminio).

Manejo

Con grandes rines y neumáticos para asfalto, la Q8 se defendió muy bien en la larga y variada ruta que realizamos desde San Pedro de Atacama. La Q8 es una SUV de carretera y rápidamente nos lo hizo notar con algo de aspereza en el modo confort. Nos bastó llevarlo en modo Allroad para que la suspensión se elevara y cambiara dramáticamente su suavidad, con mayor actuación del control de tracción en curvas para poder tener más grip. El modo Dynamic solo lo ocupamos ya hacia el final de la ruta, donde ayudó bastante a sortear las curvas ciegas de la autopista. El motor se percibe suficiente, si bien es muy progresivo, aunque quizás también la altura le afecta un poco (estábamos a 4,500 msnm). Con la caja de 8 velocidades no hay queja alguna. Como anécdota, si bien la nieve no es su mejor ambiente, Audi hizo gala de sus aptitudes, ayudando a desatorar a una Ram 1500 de Policías de Chile,que sufrió por las inclemencias del tiempo. 

Cualidades clásicas de Audi, siguen presentes, un andar muy estable y una dirección progresiva que te ayuda a tomar bien las curvas. En si, es bastante aislada y eso es porque también cuenta con un sistema de chasis electrónico que contrarresta vibraciones. Lo mismo para los parabrisas con tratamiento acústico y algunas aplicaciones aislantes. Solo se siente algún que otro ruido de rodaje y aerodinámico. Si quieres mejorar la sensación al volante, el modo Dynamic con la caja en modo Sport ayudan a conectarte más con su manejo. Al lado de otros modelos, como puede ser una X6 o incluso, una Range Rover Velar, hay cierta sensación de ligereza, algo que hemos sentido otras veces en modelos de la línea S y RS de Audi, lo que se traduce en un manejo bastante agradable y sencillo.

En carretera, sus más de 30 radares y sensores te mantienen muy seguro. Cámaras en 360 grados, visión nocturna, asistente de estacionamiento, control crucero adaptativo, asistente de mantenimiento de carril, radar de punto ciego y más, son parte de la inmensa suite de asistencias, que puedes desactivar a tu gusto según la situación. 

Conclusión

Si esta es la tónica de cómo se vienen los futuros Audi, vemos que la esencia no cambia mucho, pero si se atienden elementos claves que estaban en deuda, en especial el diseño y la calidad percibida, más rica en texturas, pero sin sacrificar la identidad moderna de la marca. La Q8 logra el punto exacto entre un diseño más agresivo y pasional, sin perder confort o lo práctico. La tecnología es clave, pero en lugar de ser confusa o inútil, aquí todo es bastante lógico y sencillo de operar (después de unos minutos de aprendizaje). Todo lo vas a usar y hay cosas que no tienen porque ser exactamente evidentes (como la dirección a las cuatro ruedas) pero sabrás que está ayudándote. No te distrae mucho de tu función principal, que es mirar hacia el frente y disfrutar. 

Será una excelente SUV para quienes busquen mayor performance y un estilo audaz, sin sacrificar lo práctico. A lo mejor no tiene una personalidad dinámica muy marcada (más que el clásico tipo de manejo Audi), pero lo compensa con mucha personalidad en su diseño y la excelente implementación de todos sus recursos electrónicos. Si quisieras más agudeza en su respuesta, habría que esperar a una futura SQ8, que se dice, sería la receta perfecta para este modelo construido en Bratislava, Eslovaquia.

Su debut, se dará primero en  Alemania y otros países europeos en el tercer trimestre del año. A México, su llegada está pactada para octubre próximo, así que tienes unos meses para ahorrar. 

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