Cada que el preparador japonés Liberty Walk realiza un trabajo de personalización sobre un vehículo está garantizado que la carrocería aumentará su anchura gracias a los llamativos kits estéticos. Es un hecho que este taller es reconocido a nivel mundial por su exorbitante estilo de tuning.
Si bien en la lista de proyectos de Liberty Walk abarca una gran cantidad de modelos, que van desde un Toyota Prius hasta un Lamborghini, pasando un Dodge Challenger, nunca había trabajado en un Ford Mustang como lo ha hecho ahora.
Fiel a su costumbre, el muscle car pintado en color rojo recibe un kit compuesto por salpicaderas más anchas, fascias más robustas, una parrilla rediseñada, faldones laterales, un splitter, un difusor, un spoiler y un set de rines en color negro. Junto a este paquete, el vehículo pierde altura respecto al pavimento gracias a una suspensión neumática.
Donde no existe cambio alguno en este llamativo Ford Mustang de Liberty Walk es en la parte mecánica, por lo que el EcoBoost turbo de 2.3 litros conserva los mismos 310 hp, mientras que el V8 de 5.0 litros mantiene 435 caballos de fuerza.