Tras el anuncio realizado esta semana por Volvo de que moverá su gama actual hacia modelos híbridos y eléctricos, ahora fue el turno de Rolls-Royce, la marca británica de súper lujo perteneciente al Grupo BMW, la que anuncia su definición de futuro tecnológico.
Según la revista Autocar, Rolls-Royce apuntará hacia la movilidad eléctrica saltándose el tradicional paso intermedio que significa la tecnología híbrida.
"La electrificación es el camino a seguir y no habrá pasos intermedios para nosotros como la hibridación", indicó el CEO de la marca, Torsten Müller-Otvös. "Es el sistema de propulsión del futuro, sin margen de error. Habrá un tiempo aunque nadie puede predecir cuándo será, que no habrá motores de combustión. Pero eso tomará mucho, mucho tiempo para que suceda".
Pero el ejecutivo aclara de antemano que hasta que la tecnología no esté suficientemente probada y desarrollada por la marca, no reemplazará su gigantescos motores V12. "Los clientes buscan excelencia en nuestra marca, por lo que no podemos cometer errores", finalizó el ejecutivo.
Hay que remontarse a 2011 para recordar la única definición pública en esta materia por parte de la marca a través de un Phantom Concept eléctrico denominado 102EX, pero por entonces, la falta de infraestructura pública y la mínima capacidad de las baterías demoraron los procesos de desarrollo.
La arremetida del Grupo BMW en esta materia podría agilizar el tránsito de Rolls-Royce hacia la electrificación definitiva.
