Decir que Aston Martin es una marca de mucha tradición no es ninguna novedad, pero quizás su propuesta estética se esté volviendo demasiado clásica, ya que desde el lanzamiento del DB9 en 2004, poco han cambiado en las líneas exteriores de sus vehículos (tampoco es que lo necesiten). El Vantage V12 S, que sin sorprender por fuera, te puede hacer perder el aliento y de paso, bastantes dólares de la cartera.
La principal evolución se encuentra bajo el cofre, incorporando un V12 que entrega 565 hp y 457 lb-pie, unos 55 hp más que el antiguo Vantage. El mismo está acoplado a una nueva caja secuencial de 7 velocidades que reemplaza a la manual de 6, noticia triste para los amás entusiastas pero que según la marca, promete cambios mucho más rápidos y un mejor aprovechamiento de la gran potencia del motor.
Otro punto destacable es que el Vantage V12 S perdió unos 25 kilos con respecto a su antecesor, factor que sumado a las mejoras mecánicas, le permiten bajar la marca de los 4 segundos en el 0 a 100 Km/h y llegar a los 330 Km/h, cifra que lo convierte en el Aston Martin de producción más veloz jamás fabricado.
Con respecto a al exterior, la marca asegura que la parrilla está inspirada en el recientemente presentado CC100 Concept, mientras que a su vez presenta la novedad de unos rines de aleación de 19” con diez brazos.
Aston Martin Vantage V12 S