Rolls-Royce Motor Cars anunció un record de ventas con 3,575 autos entregados mundialmente el año pasado, que constituye el tercer año consecutivo con la misma tendencia y el mejor resultado en sus 108 años de historia.
Este resultado implicó una serie de desafíos durante 2012, como la incertidumbre de negocios global, la situación política, las preparaciones para el comienzo de la producción del Phantom II y los trabajos de expansión de la fábrica en Sussex para apoyar la creciente demanda de los clientes por la personalización de los modelos. Pese a todo, Rolls-Royce mantuvo su posición en el mercado de ultra lujo, liderando el segmento de autos sobre 200 mil euros, constituyéndose en la marca de ultra lujo que más autos vende en el mundo.
El fuerte crecimiento en ventas se registró en diferentes regiones del mundo, con resultados notables en Medio Oriente (26%), Europa (21%) y Asia Pacífico (18%). Estados Unidos y China permanecieron como los mercados principales, mientras que otros países también registraron récords en crecimiento de ventas, como Arabia Saudita (63%) y Alemania (15%).
Como parte de la política de la compañía de desarrollar un crecimiento sostenido, se registró un aumento significativo en distribuidores, con 30 nuevos o remodelados, llegando al número de 100 por primera vez en la historia de la empresa. Rolls-Royce también se expandió a nuevos mercados en América Latina, como Brasil y Chile.
Los productos de la compañía incluyen la familia Phantom –Phantom, Phantom Extended Wheelbase, Phantom Drophead Coupé y Phantom Coupé– y la familia Ghost –Ghost y Ghost Extended Wheelbase. La demanda por todos estos modelos fue intensa. El Phantom II se lanzó mundialmente en marzo en el Salón de Ginebra y la producción de la planta de Goodwood aumentó para satisfacer la demanda de los clientes.