Utilizando como lienzo 20 cofres de Porsche 911 GT2, el amante de los deportivos y de la pintura, Jorge Gómez creó esta colección que, sumando la potencia de las obras, supera los 10.000 caballos del puro arte. Ideada en América Latina, ahora esta particular expresión "octánico-artísitica" se estrena en Europa tomando por asalto el Museo que la marca posee en Stuttgart, Alemania, hasta el 8 de enero de 2012.
Se trata de una propuesta en la que participaron 19 artistas de Argentina y Uruguay incluyendo firmas de la “cilindrada” de Pablo Atchugarry, Rogelio Polesello y Jorge Ferreyra Basso, por nombrar algunos. Cada uno de ellos aportó su toque de creatividad e inclusive técnicas muy diferentes, incluyendo varios materiales, desde acrílicos hasta goma de ruedas, pasando por mosaicos formados por pequeñas baldosas.
Si te parece que una obra de arte es muy estática para que esté asociada a un vehículo tan veloz como un Porsche 911 GT2 con motor 3.6 litros de 6 cilindros opuestos bi-turbo que supera los 500 CV, el propio Gómez se ocupa de colocarlos en su bólido y sacarlos a dar un veloz paseo. Ojalá que la pintura resista y no se corra cada vez que supera los 300 km/h.