Comprar un auto nuevo o usado es algo excitante. Pero es un proceso complejo bajo el cual puedes salir pagando miles de pesos más o quedarte con un vehículo con el cual no estás feliz a la larga. Para evitar lo anterior te decimos los 10 errores más comunes que se cometen cuando alguien compra un auto:
1.- Enamorarse de un modelo
La emoción no debe gobernar la elección de tu auto y más aún cuando gastas cientos de miles de pesos en él. Al estar obsesionado con cierto modelo te puedes cegar a ver otros vehículos que pueden ser mejores para ajustarse a tus necesidades o realizar una búsqueda exhaustiva de valoración, opiniones, confiabilidad, seguridad y precio. Al mantener los ojos bien abiertos evitas ser susceptible a las tácticas de algún vendedor y termines pagando más de lo que deberías. Para determinar que vehículo es mejor para ti, debes hacer un lado la emoción y enfocarte en hacer tu tarea, comparando modelos y evaluar lo que quieres junto con tus necesidades. Ya tendrás tiempo para gozarlo después.
2.- Saltarse la prueba de manejo
La prueba de manejo es una de las principales partes del proceso de compra de un vehículo. No te conformes con lo que se ve y está en los diversos folletos con fotos de los autos que te interesan; haz una prueba de manejo de los que te agradan, esa es tu mejor oportunidad para ver si el vehículo cumple tus expectativas y qué tan bien se ajusta a ti y a tu familia. Evita sorpresas después que lo hayas comprado. Es impresionante que muchas personas no prueban la unidad o simplemente lo adquieren porque está “bonito” (no lo hagas ya que después te puedes arrepentir). Es crítico que te tomes un cierto tiempo (al menos 30 minutos) para llevar a cabo una prueba de manejo completa y checar exhaustivamente interiores, motor, pintura, chasis entre otras cosas.
3.- Negociar sobre el precio de lista
No uses el precio de lista como referencia para negociar un acuerdo. Un agente de ventas puede ofrecerte un descuento de 5,000 pesos por debajo del precio de lista y pensarás que estás obteniendo una buena oferta cuando en realidad no es así. A menos que el vehículo tenga mucha demanda y haya pocas unidades, frecuentemente puedes obtener un descuento justo de lo que en realidad el distribuidor pagó por el vehículo. Cuando sabes el costo real del vehículo, podrás saber en realidad cuánto es el margen de ganancia del lote o distribuidor, con ello sabrás determinar un precio con el cual puedas negociar. Puedes conocer el costo del distribuidor restando incentivos de ventas tales como rebajas y retenciones.
6.- Esperar llegar a la agencia para pensar en financiamiento.
Tal vez seas muy bueno para negociar una buena oferta, pero sino escoges un financiamiento con el mismo cuidado, podrías perder todo lo que ahorraste sobre el precio de compra del vehículo y más. Un comprador que no ha investigado las características de un financiamiento está especialmente vulnerable a ser manipulado por la agencia o lote. No sólo te tienes ajustar a los términos de la agencia, sino que además elevan la tasa de interés lo que te hará pagar más en todo el periodo del crédito. Es por ello que debes cotizar en diferentes instituciones financieras y obtener una pre-cotización sobre el auto que deseas antes de ir a la agencia a comprarlo. Checa en bancos, sitios “on line” y demás instituciones, ve cuál te ofrece mejor tasa de interés. Si la agencia te ofrece mejores condiciones para el crédito que las que tú conseguiste, siempre podrás elegir esa opción.
7.- Despreciar el valor sobre dispositivos de seguridad
Actualmente muchos vehículos ofrecen una gran variedad de prestaciones en seguridad. Muchos compradores no saben cuáles son los más importantes o en qué fijarse cuando comparan vehículos. Los frenos ABS, el control electrónico de estabilidad (ESC) y las bolsas de aire laterales son ejemplos de dispositivos efectivos en seguridad que vale la pena pagar. Estudios ha mostrado que el ESC puede ayudar significativamente a reducir accidentes y desgracias (éste es especialmente importante para las SUVs ya que ayudan a prevenir volcaduras). Pruebas de choque laterales muestran que las bolsas de aire son realmente efectivas para prevenir fatalidades. Desafortunadamente, no siempre puedes depender sobre un agente de ventas que te dé información precisa y confiable sobre estas prestaciones. Es por ello que debes investigar profundamente el beneficio de todos los dispositivos disponibles y ver qué vehículos tienen los mejores para protegerte a ti y a tu familia.
4. Enfocarse solamente en el pago mensual para negociar.
A los vendedores les agrada enfocarse en el promedio de pago mensual cuando negocias una oferta. Acaso cuando conoces a un agente de ventas y te saluda una de las primeras preguntas que te hace es ¿Ha pensado cuánto quiere pagar mensualmente? No caigas en la trampa, es el primer paso para ser manipulado con números y salir pagando de más por tu vehículo. Al usar el precio mensual como la parte principal, el vendedor puede englobar en el “nuevo precio del vehículo” factores como tomar tu auto a cuenta, financiamiento o arrendamiento dándole mucho colchón a él o ella para ofrecerte un “buen precio” en cierta opción y elevando su ganancia por otro lado. En su lugar negocia una cosa a la vez. Primero establece el precio del vehículo, después discute si toman tu auto a cuenta, si vas a financiar o vas a tomar un arrendamiento. Un importante consejo: no reveles si deseas comprar a través de un arrendamiento hasta que primero hayas acordado el precio del vehículo.
5.- Comprando la “oferta” en lugar del vehículo
Los fabricantes han ofrecido una gran variedad de incentivos de venta en años recientes tales como tasa 0% de interés en el financiamiento, rebajas en efectivo y programas de descuento de empleado. Estos pueden ahorrarte dinero, pero es importante recordar que cualquier oferta es tan buena como el vehículo que va ligada a la misma. Sólo porque estás recibiendo un buen descuento no significa que deberías comprar ese auto. Después de todo estarás manejando ese auto por muchos años, así que asegúrate que es el adecuado para ti. Investiga exhaustivamente cualquier modelo que estés considerando y checa sus valoraciones, confiabilidad y pruebas de modelos similares. Tal vez podrías encontrar que puedes tener un mejor vehículo por mucho menos dinero. A pesar de un atractivo descuento, un vehículo con baja calidad o poco confiable y con la posibilidad de una depreciación mayor quizá no sea una gran ganga a la larga. Es importante: no permitas que un especial incentivo evite que sigas negociando. Las rebajas y financiamientos son subsidiados por fabricantes automotrices, no de la agencia o distribuidor. Deberías aún negociar el precio del vehículo como si no tuviera ningún incentivo. No hay ninguna razón por la cual no puedas obtener el mejor precio y el mejor incentivo.
8.- Comprar cosas innecesarias
Las agencias generalmente tratan de venderte cosas extras que incrementan el margen de ganancia pero son una pérdida de dinero. Ellos pueden incluir cosas como: protección contra la oxidación, protección de fábrica y pintura o marcar los vidrios, calaveras y otras autopartes con el número de VIN con el objeto de prevenir el robo. No aceptes esos servicios innecesarios y cuotas (si ves que te los incluyeron sin tu aprobación recházalos). Los vehículos actualmente ya incluyen protección en contra de la oxidación, además existe una gran variedad de productos en el supermercado que te pueden ayudar a cuidar tu auto y sólo te costarán unos cuántos pesos. Si deseas marcar o asegurar tus autopartes hay lugares donde es más económico hacerlo que en una agencia. Finalmente considera realmente si vas a contratar una garantía extendida puede salirte muy caro, ya que si tu vehículo es muy confiable o si esperas usarlo menos de cinco años no vale la pena.
9.- No investigar el valor actual de tu vehículo
Puedes obtener una gran oferta sobre tu auto nuevo pero perderás todo lo que te ahorraste a la hora de que tomen tu auto a cuenta. Es muy importante investigar el precio actual de tu vehículo antes de comprar uno nuevo. Investiga bien el precio de venta y compra, así como el precio en lotes o agencias para que así sepas cuánto te van a dar o por si lo deseas vender por tu cuenta. Siempre obtendrás más dinero si lo vendes tu mismo, sólo requiere de un pequeño esfuerzo. Al saber el precio verdadero y mantenerte sobre el precio que deseas durante las negociaciones, podrás obtener un precio justo. Puedes consultar listas de precios en nuestro portal aquí.
10. No checar un auto usado por un mecánico
Cuando compres un auto usado, las condiciones del mismo lo es todo. Incluso el auto más confiable puede convertirse en el peor si no se le dio mantenimiento. Antes de que compres un auto usado, lleva a tu mecánico de confianza para que lo cheque. El podrá decirte si el auto ha sufrido algún accidente o tenga algún problema escondido (si así fuera pide una cotización de cuánto te costaría repararlo con ello te darás una idea que tan mal está el vehículo y te puede servir para negociar el precio con el vendedor). Nunca compres un auto que no hayas probado y nunca des dinero por adelantado.
Fuente: www.consumerreports.org