La huelga, que afecta a cerca de 14 mil 700 trabajadores -cerca de 9 mil 400 de ellos obreros sindicalizados- estalló luego que las pláticas entre las partes se rompieron esta mañana, pues la empresa no aceptó dar un aumento directo al salario que exigía el sindicato.
El fabricante argumentó que la caída en las ventas del orden del 31% le imposibilitaba a dar el incremento al salario que exigen los representantes de los trabajadores mientras que la empresa ofreció un bono de 5,500 pesos como ingreso extraordinario hasta febrero del 2010.
El líder del sindicato, Jaime Cervantes Rosas, apuntó que se debe dar dicho aumento a los trabajadores, pues en el caso de otras empresas del ramo en que se ha dado un bono, ha sido porque estaban al borde de la quiebra, lo que no sucede en Volkswagen.
La última huelga de la firma alemana fue en el 2006 y ya casi se está haciendo una tradición que puede acabar por romper la cuerda y hacer que la planta se vaya a otras latitudes.