Pese a los serios problemas por los que atraviesa Saab, ahora como parte de una empresa muy pequeña de origen sueco llamada Koenigsegg, hubieron coches en esta marca dignos de ser comentados. En México, la marca tuvo serios problemas cuando su primera remesa en el 2003 presentó serios problemas en las transmisiones automáticas compartidas en aquél entonces con el fabuloso Vectra con el cual compartían plataforma.
Hoy que ya está confirmada la venta de Saab a Koenigsegg a través de un préstamo de un banco europeo y aun cuando los analistas argumentan que este acuerdo de transferir una empresa de 3,400 empleados a otra de sólo 19 trabajadores es totalmente absurdo, dejamos testimonio del legado de Saab en la industria automotriz.
1986 Saab 900 Convertible: producidos sólo para el mercado norteamericano, estos convertibles turbocargados de 16 válvulas eran muy exclusivos. En su año de introducción, 1986, se vendieron los 400 convertibles que se llevaron a los Estados Unidos y fue tan rápida su venta que la gente pensó que se trataba de un auto exótico que no se comercializaba de manera generalizada en aquél país.
1984 Saab 9000: Fue tan solo el tercer automóvil producido por Saab. Se consideró un habitáculo amplio y el hacer de este auto un sedán con prestaciones de un hatchback. Su espacio interior estaba tan bien desarrollado que a pesar de sus dimensiones se le comparaba contra Cadillac o Lincoln. En 1990, este auto fue considerado como el más seguro de Suecia, galardón que refrendó en 1992 y 1994.
1956 Saab Sonett Super Sport: Un auto de cielo abierto biplaza del que sólo se fabricaron seis unidades. Dos de ellas en el museo de Saab en Suecia, si bien se sabe que todas funcionan a la perfección en la actualidad.
1967 Saab 99: Fue pionero en cuanto a seguridad se refiere. Fue el primero en incluir refuerzos de colisión adelante y atrás y también el que inició la tradición de Saab de colocar el switch del encendido en la consola central entre los dos asientos. Este auto utilizaba un motor de 4 cilindros y 1.7 litros y fue auto del año en Suecia en 1972.
1984 Saab 900 Turbo 16 Aero: un auto de empuje y potencia que comenzó la tradición de Saab en el terreno de los deportivos de gran clase. Ofrecía un motor de 175 caballos de fuerza y 206 libras-pie de torque.
2002 Saab 9-3 Sport Sedan: Fue el primer Saab que conocimos en México y también el primero que amamos y odiamos al mismo tiempo. Era un auto con interiores de lujo, amplia capacidad de cajuela y una sensación de manejo realmente deportiva gracias al motor 2.0 litros turbocargado. Fue éste, el que visitó el taller tantas veces por problemas en la transmisión pero que cuando sus dueños disfrutaban del auto en buen estado, no había la menor intención por deshacerse de él.
2003 Saab 9-3 Convertible: Fue desarrollado en paralelo con el 9-3 Sport Sedan. Su chasis era tan rígido que sorprendía que un convertible no mostrara rechinidos propios de cuando a un auto se le quita el techo. Ofrecía un spoiler deportivo y sobre todo el ser uno de los primeros convertibles realmente deportivos del mercado.
2008 Saab Turbo X: Un motor V6 de 2.8 litros turbocargado que ofrecía 280 caballos de fuerza y 295 libras-pie de torque acoplado a la transmisión de seis relaciones, le daban a la X una característica casi pornográfica y atrevida. En vez de mandar el poder hacia adelante, los ingenieros suecos desarrollaron algo mejor: la tracción integral en las cuatro ruedas.
1959 Saab 95: Este innovador automóvil poseía una de las características más vendidas en la actualidad: capacidad para siete pasajeros. Cualquier parecido entre este automóvil de 1959 y los actuales recreativos denominados crossovers, es mera coincidencia.
Saab 37 Viggen: A Saab le gustaba gritar su origen aéreo a los cuatro vientos y este avión era en realidad de donde Saab ostentaba dicho slogan de “nacido de los aviones”. Fabricado entre 1970 y 1990, más de 300 de estos aviones fueron entregados a la Fuerza Aérea Sueca. El término Viggen en español significa “relámpago”.