El pasado mes de noviembre del 2007 en Zinapécuaro, Michoacán se realizó el acto protocolario con representantes de la marca y el Presidente de México, para colocar la primera piedra de lo que sería la primera planta ensambladora de la empresa China FAW. Dicha construcción se llevaría a cabo en sociedad con el Grupo Salinas para la comercialización de sus autos en las tiendas Elektra.
En el periodo comprendido desde el mes de noviembre al presente se informó por los vecinos de la localidad que incluso la primera piedra había sido removida y no quedaba ningún indicio o intención por construir. Todo indica que el Grupo Salinas observó que sus autos no fueron lo que ellos esperaban como marca y sus ventas con sus “abonos chiquitos” no funcionaron, además de la calidad de sus modelos de entrada, no convenció al consumidor mexicano.
La marca FAW alude a la crisis mundial dicha cancelación, pero es un hecho que la inversión de 150 millones de dólares quedo en el olvido.