Tras presentar pérdidas por 6 mil millones de dólares en el primer cuarto de 2009, el gigante de Detroit, General Motors está acelerando las acciones que en teoría deberán impedir que caiga en la bancarrota. Adicional a la desaparición de marcas como Saab, Hummer o Pontiac, la gama de las marcas que prevalecerán también se verá reducida significativamente.
En el caso específico de Chevrolet, los modelos SS del Impala y Cobalt Sedán ya no saldrán a la venta como modelos 2010, asimismo, la variante rabiosa del sedán grande STS de Cadillac, es decir el STS - V Series tampoco llegará en 2010, el caso de este Cadillac, con su poderoso motor de 470 hp es decepcionante, ya que su nivel de ventas fue penoso desde el inicio, por lo que la firma de lujo se quedará con el CTS - V como único modelo deportivo.
Lo anterior, permite a General Motors, tener una gama de producto más amigable con el medio ambiente, situación que sin duda le ayudará en sus números para el CAFE.
De cualquier manera GM ha sido muy enfático en que modelos como los Chevrolet Corvette, Camaro o Volt no corren riesgo y seguirán o llegarán al mercado de acuerdo a lo planeado.
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