4 de noviembre de 2008. Si bien es cierto, en meses pasados la industria norteamericana había mostrado caída en ventas, la combinación de factores como la drástica baja en la confianza del consumidor, el financiamiento más caro y difícil de obtener, los mercados de valores con jornadas verdaderamente terribles y la tensión electoral han propiciado que nuestro vecino país del norte haya experimentado un mes de octubre con una caída en las ventas del 32%, con solo 852,000 unidades vendidas en todo el territorio, no se veía un resultado tan malo desde 1992 sin contar con el hecho de que ha habido crecimiento poblacional.
General Motors experimentó la peor caída de los seis grandes de EU, con una baja en ventas del 45%, seguido de Chrysler con 34.9% y Nissan con 33%, la firma del óvalo azul también bajó un 29.2% mientras que Honda perdió un 25.2% y Toyota un 23% que además tiene la preocupación que su peor vehículo en performance de ventas es la Tundra.
Mark LaNeve Vicepresidente de ventas de GM para Norteamérica comentó: "Soy una persona optimista por naturaleza, pero en mis 27 años de carrera jamás vi un mes como este. Los niveles de ventas fueron acorde a una muy severa recesión". LaNeve también comentó que los norteamericanos gastaron en promedio el 2.8% de sus ingresos en automóviles, el nivel más bajo desde que se tiene registro, un 4% es el nivel normal.
Jim Press, Vicechairman de Chrysler y un ejecutivo con larga trayectoria dentro de Toyota comentó: "En octubre pudimos ver que tan bajo puede caer la industria, es el mes más duro que he visto en mi vida".
Otros fabricantes con volúmenes menos importantes también han mostrado caídas importantes, Hyundai cayó un 31% y su Vicepresidente manifestó que se viven los tiempos más difíciles para la industria automotriz moderna. Volkswagen por su parte con una caída del 7.9% y con solo un retroceso de. 0.6% en lo que va del año.
Otros resultados son: Volvo - 51.1%, Lexus -37.6%, Mazda -25.9%, Mitsubishi -19%, Subaru -14%, Audi +0.3%, BMW y Mini - 5%, Mercedes Benz y Smart - 25%
La industria automotriz de EU ha mostrado debilidad desde el desastre del Huracán Katrina hace tres años, posteriormente el alza en los precios de los combustibles se convirtió en un factor importante, pero ninguno de los anteriores dañó tanto las ventas como el problema del crédito y la confianza del consumidor. Asimismo el manejo mediático de las elecciones ha propiciado un clima de ansiedad en los consumidores.
Sorprende el caso de Audi que tuvo un marginal incremento en sus ventas gracias al nuevo A4 2009 y un desempeño aceptable de A5, A8 y R8.
Por el momento nadie puede decir si la industria ha tocado fondo, aunque todos quisieran que así fuera, de cualquier manera las firmas esperan que sin llegar a mostrar signos positivos, las ventas deberían estabilizarse un poco una vez que las elecciones presidenciales queden atrás.
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