Nuevamente la fortuna fue la que dio el espectáculo en la Fórmula 1, si bien en las calificaciones del Gran Premio de Hungría las flechas de plata se ponían por delante de la Scudería, pero esto desde el principio parecía un espejismo ya que la puesta a punto de Ferrari era enfocada a las llantas y la temperatura dentro de un circuito muy cerrado donde han tenido ventaja este año.
La calificación fue nuevamente para Hamilton seguido de Heikki y Felipe Massa quien como sabemos tiene grandes momentos pero también grandes errores. La maniobra de la primera curva puso a temblar a todos los seguidores de Ferrari ya que Massa se dejó ir con todo y aguanto la frenada para emparejarse a Hamilton bloqueando sus llantas y saliendo a la par de la curva aprovechando esta posición el F2008 salió mejor arrebatándole el primer puesto a Lewis.
El ritmo de Hamilton-Massa fue similar hasta que la temperatura de las llantas en el equipo rojo marcó la diferencia y el piloto brasileño comenzó de a poco a hacer ventaja suficiente para hacer sus paradas en pits y no perder el puesto. Prácticamente toda la carrera fue seguido por Lewis y Kovalainen y todo hacía indicar que la carrera estaba sentenciada con ese podio.
Pero comenzó la ruleta a rodar y el primero en perder fue Hamilton al pinchar su llanta delantera izquierda a la mitad del circuito por lo que perdió mucho terreno y al final se tuvo que conformar con la quinta plaza. Con esta situación la ventaja de Massa fue más cómoda y la pelea sería por la tercera plaza ya que Heikki era el ecuador entre Massa y los demás.
