El diseño y sobriedad de Mercedes Benz y la deportividad de Mclaren se vieron perfectamente combinados en el SLR el cual cuenta con un diseño realmente atractivo y hasta seductor. Por donde se le vea es interesante, ya sea al frente con un claro enfoque a un Fórmula uno, las branquias y escapes laterales o la compacta y aerodinámica parte trasera.
Al interior materiales de primera, con toda la comodidad que pueden ofrecer los alemanes en sus autos Premium. Estos elementos se veían contrastados con las prestaciones del auto, que si bien un motor V8 5.5 litros que genera 557 hp de potencia suenan bien, pero para mover un auto que pesa casi dos toneladas (1768 kg) fue siempre contradictorio tomando en cuenta que el auto no es muy grande.
Pero ahora el divorcio de las armadoras ha dejado a este hijo huérfano y han hecho de esta separación algo tranquilo quedando de común acuerdo en lanzar la última edición del SLR en una versión Speedster, sin techo ni parabrisas lo que rebaja su peso en 200 kg, logrando así una velocidad punta de 350km/hr.
Esta última edición será de 75 unidades con un módico precio de 450.000 euros que en algún tiempo cuando sea de colección se multiplicará por muchos más euros.
