09 de junio de 2008. El fabricante teutón Porsche, famoso por sus autos deportivos, aunque también muy exitoso en el terreno de los utilitarios ha sometido a su modelo más emblemático, el 911 a una serie de cambios para el año modelo 2009 en aras de mantenerlo como uno de los mejores deportivos de la actualidad, al tiempo de que vigila el tema de consumo y emisiones.
Los modelos 911 Carrera y Carrera S equipan ahora en sus mecánicas boxer de 3.6 y 3.8 litros respectivamente un sistema de inyección directa, el cambio implica una ganancia de 20CV para el 3.6L que se queda ahora en 345CV, mientras que el más poderoso 3.8L eleva su potencia en 35CV llegando así hasta los 385CV. Asimismo los consumos se reducen en un 15%.
La otra gran novedad es la incorporación de una transmisión de doble clutch y siete cambios denominada como Porsche-Doppelkupplung, que promete la suavidad típica de una automática, pero con las ya famosas ventajas de este tipo de cajas, que para muestra de que son el futuro en términos de alto rendimiento, esta tecnología es la incorporada por el poderoso Nissan GT-R o la que veremos en breve en el BMW M3, pero que también podemos disfrutar en un VW GTI. Dicho cambio significa una ganancia en la aceleración de 0-100 km/h de 0.2 segundos, que podría incrementarse en otros 0.2 segundos para aquellos que opten por el paquete Sport Chrono Plus que incluye un Launch Control.
Los cambios estéticos son casi imperceptibles, las luces diurnas de LEDs en la parte frontal y calaveras con la misma tecnología, así como algunas modificaciones en las entradas de aire son lo más destacable.
Sin duda el 911 Carrera era ya una máquina impresionante, pero con la incorporación de estas nuevas tecnologías Porsche se pone al día en la utilización de mecanismos que ayudan a incrementar el desempeño al tiempo que reducen los consumos. Por otra parte las transmisiones de clutch cual se están convirtiendo en el estándar de la deportividad y comodidad.
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