11 de abril de 2008. Según la NHTSA el llamado a revisión se debe a un potencial problema en 180,963 unidades vendidas en EU de Chrysler Cirrus y Dodge Avenger equipados con el monitor de presión de las ruedas.
El problema se genera porque en el sensor que monitorea la presión de los neumáticos existen conectores eléctricos sin utilizar que pueden corroerse y provocar un corto circuito. Si bien es cierto que la falla puede desencadener en problemas como: batería descargada, que no encienda el motor, control de crucero inoperable, la más grave sería que el motor podría apagarse al momento de estar circulando, lo que podría resultar en un accidente.
En el caso de México, la cifra asciende a 12,144 unidades y la campaña de servicio da inicio el día de hoy, los propietarios serán contactados por la marca para que acudan al distribuidor a efecto de que los citados conectores sean debidamente sellados.
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