Noviembre de 2007. Luego de la separación entre Daimler y Chrysler, Cerberus, el nuevo propietario de Chrysler está buscando lograr la rentabilidad lo más pronto posible, la primera acción de impacto que veremos en el portafolio de producto, además de la adición del nuevo crossover Journey que se presentó en Frankfurt el mes pasado, es la eliminación de cuatro modelos de la gama después de 2008:
Pacifica: ese crossover que se benefició de muchos componentes Mercedes desde su origen, pero que nunca fue bien entendido ni recibido por el mercado.
Crossfire convertible: basado en la plataforma del anterior Mercedes SLK y fabricado por Karmann en el viejo continente.
Dodge Magnum: la versión guayín del Charger, un modelo que a mi juicio es bastante atractivo, pero que nació en el mercado equivocado.
Sorprende mucho la eliminación del Magnum ya que ha estado en el mercado por poco tiempo y en Europa son bien recibidas las station wagon. Lo cierto es que ahora si veremos una política más orientada a lograr la eficiencia y la rentabilidad de la nueva Chrysler, eliminando mucha de la innecesaria nostalgia hacia ciertos modelos que tradicionalmente no han funcionado.