13 de Junio de 2007: Coger el coche para regresar a casa rápidamente después de una juerga o una barbacoa conlleva el riesgo de topar con un alcolímetro, sin embargo, es frecuente que no se tenga en cuenta este riesgo.
Esto podría cambiar pronto, gracias a un alcoholímetro mucho más práctico, que facilita controles más rápidos y exactos, con el que la policía puede ejercer ahora una mayor presión sobre los conductores que manejan bajo la influencia del alcohol, allá en el viejo continente.
Según un reciente estudio, en las carreteras de Europa siguen muriendo a causa del alcohol 10,000 personas al año. Alrededor del 10% de los accidentes en los que se producen heridos son debidos al alcohol, mientras que los que causan muertes en carretera por este motivo alcanzan incluso el 20%.
Aunque los alcoholímetros de la policía resulten inoportunos y desagradables, salvan la vida de muchas personas. Con la prueba de alcoholemia del AlcoQuant 6020, los agentes tendrán más éxito en la detención de bebedores, ya que con este aparato pueden efectuar un control más eficaz y exhaustivo, debido a que es más rápido que los aparatos de prueba convencionales.
El procedimiento de control dura unos 20 segundos como máximo, esto es posible gracias a un sensor electroquímico que reacciona exclusivamente al alcohol y, al igual que una célula de combustible, genera una corriente eléctrica que sirve de base para calcular el contenido de alcohol en la sangre. Después de una medición y, al cabo de unos segundos, el aparato vuelve a estar listo para su funcionamiento.
Sería excelente que éste aparato también estuviera en nuestro país, ya que a la fecha el porcentaje de muerte causado por accidentes bajo la influencia del alcohol alcanza más de 25%, muy triste ¿no crees?
