16 de Mayo de 2007: Las bujías son la ventana del motor; su única mirada hacia la cámara de combustión, y pueden ser usadas como una herramienta de diagnóstico invaluable. Como el termómetro de un paciente, la bujía nos muestra los síntomas y las condiciones del desempeño del motor.
Con el uso, las bujías sufren electro-erosión que provoca un desgaste en el electrodo, aumentando la distancia de salto de chispa, esto ocasiona que la bujía requiera de un mayor voltaje para cubrir la distancia y por lo tanto, durante situaciones de aceleración a fondo o altas velocidades pueden perderse explosiones en el motor desperdiciando combustible y perdiendo potencia.
El intervalo de cambio de bujías depende del tipo de bujía, de la cantidad de electrodos y la calidad de la gasolina principalmente. Regularmente las bujías de cobre con 1 electrodo se cambian cada 10,000 km. Existen bujías de cobre con varios electrodos que pueden durar funcionando correctamente hasta 15,000 km por electrodo, es decir; hasta 60,000 km para bujías de 4 electrodos. El caso de las bujías de platino es diferente, ya que estas pueden durar hasta 80,000 km por cada electrodo.
Las bujías tienen 2 funciones principales: encender la mezcla de aire-combustible y remover el calor de la cámara de combustión, es decir; además de proporcionar la chispa a la cámara de combustión, la bujía también trabaja como intercambiador de calor, extrayendo la energía calorífica no deseada de la cámara de combustión al sistema de enfriamiento del motor.
El rango térmico de la bujía, es la habilidad de la misma para disipar calor en la cámara de combustión y llevarlo al sistema de enfriamiento, y se determina por la longitud del aislador central de cerámica, su habilidad para absorber y transferir el calor de combustión, el material del aislador y el material del electrodo central. El rango térmico de una bujía no tiene relación con el voltaje actual que se transfiere a través de la misma.
La temperatura de la punta de la bujía debe ser lo suficientemente baja para prevenir pre-igniciones y/o destrucción de los electrodos, pero suficientemente alta para quemar los depósitos de la combustión y no acumular ceniza en la punta de la bujía.
Los motores de bajo desempeño son motores fríos, por lo que requieren de una bujía caliente (con baja disipación de calor). Por lo contrario, los motores nuevos de alto desempeño son motores muy calientes que requieren bujías que disipen el excesivo calor que se genera en ellos.
Por esta razón, es importante que al momento de cambiar las bujías de nuestro auto, colocarlas con el rango térmico especificado por el fabricante del vehículo. El utilizar bujías equivocadas reduce considerablemente la eficiencia del motor y la vida de las bujías.
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