Manejar un automóvil en una prueba a mediano plazo, es verdaderamente descubrir su esencia y prestaciones, en este caso, pude percatarme del alto nivel de equipamiento y excelente capacidad de cajuela, después de una abultadísima cuenta tras visitar el súper mercado, del Peugeot 307 Sedán.
Esta prueba logró quitarme el prejuicio que había encontrado tras la estética de la cajuela que desde mi óptica, rompía totalmente la armonía del diseño del coche pero en honor a la verdad, la funcionalidad superó al valor estético y eso me hizo hacer un gesto de aprobación para este coche de la firma francesa Peugeot.
Nuevamente aquí se interponen los valores subjetivos a la objetividad en el sentido de que al decidir la compra de un coche, primero nos fijamos en el diseño, luego en el interior, luego en el olor a nuevo y después en la autonomía de combustible. Así es el proceso actualmente, a pesar de que debería ser de la siguiente manera:
La atmósfera interior
La funcionalidad y el equipamiento
El olor a nuevo
El diseño exterior
Compramos un coche por el valor que nos da como personas y porque finalmente nos va a ofrecer una recompensa sensorial al pasar gran parte de nuestra vida dentro de él. En este Peugeot 307 Sedán probado a mediano plazo, el equipamiento es excelente y equiparable con un auto de mayor precio y segmento, la atmósfera interior es superior a lo que se paga por el coche ($179,900 pesos), huele bien y al diseño exterior, nos acabamos acostumbrando.
De la misma manera en que el vino sabe diferente a la personas, dado que no hay dos paladares iguales, lo mismo sucede con los coches, nunca le gustará el diseño de un coche de la misma manera a dos personas distintas.
Un ejemplo de enología que aplica perfectamente para ilustrar lo que queremos decir, es de la sencillez del Beaujolais Nouveau a la fastuosidad de un Château-Margaux de 1982, la calidad será siempre el denominador común a pesar de que la diferencia en precio de ambos productos sea brutalmente diferente.
De acuerdo con las directivas de la Unión Europea, la estrategia de los viticultores franceses se orienta desde hace unos años a aumentar las superficies de vinos finos en detrimento de los vinos de mesa. Así pues, la producción vitivinícola con denominación de origen ha aumentado un 70% en veinte años. Para obtener un gran vino es preciso conjugar armoniosamente cuatro factores: la variedad de cepa, el suelo, la pericia del viticultor y el clima, aunque este último sea aleatorio.
Por estas razones y como conclusión de esta prueba de cuatro meses del Peugeot 307 Sedán, les podemos decir que:
Nos convenció el equipamiento
Nos convenció la capacidad de la cajuela
Nos convenció su desempeño urbano
Nos convenció el diseño (al final del día)
Y lo que sí necesita mejorar es:
La respuesta de su caja de cambios
El tamaño de sus portaobjetos
La calidad del sistema de audio.
En conclusión, les comentamos que es un muy buen automóvil para uso urbano.
