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Prueba de Manejo

Mercedes Benz ML 63 AMG : A prueba

<BR>Por Carlos González Arizmendi - Marzo, 2007 La Clase M, es una recreativa que, si bien no ha podido contener del todo los embates de la BMW X5 o de las nuevas participantes del segmento como la Acura MDX, tiene un as bajo la manga que viene del preparador AMG.

Mercedes Benz ML 63 AMG : A prueba
La Mercedes Benz ML 63 AMG, es un portento de musculatura, fuerza, tecnología y comodidad conjuntada en una camioneta todo terreno ultravitaminada. Es una de esas camionetas que sobresalen del resto y que, dicho sea de paso, si llega a la ostentación. No es para subirse y presumirla, es simplemente para un tipo de cliente que sabe perfectamente qué es lo que está comprando y que sabe que tendrá que soportar las miradas curiosas a su alrededor como flashes de cámaras de paparazzis persiguiendo a la estrella de moda.

Motor

Su alma de acero y aleaciones de ocho cilindros en "V", alcanza los 503 caballos de fuerza (510 CV) y 553 libras-pie de torque, la convierten en el todo-terreno atmosférico más potente del mercado. La denominación 63, no es por la cosecha, sino por la cilindrada que tiene que en realidad es de 6.208 cm³.

La transmisión es la 7G Tronic, que en términos coloquiales, mejora el consumo y las prestaciones de los modelos que la llevan, con relación a la anterior caja de cinco velocidades. Mercedes-Benz estima que -en función del modelo que se trate- la reducción de consumo será de unos 0,6 l/100 km. La mejora de aceleración prevista es bajar 0,3 s de 0 a 100 km/h.

La apertura de la caja (diferencia de desarrollo entre la relación más corta y la más larga) es mayor con la de siete relaciones. Eso, y una mejor flexibilidad para seleccionar las relaciones, hace que el régimen del motor sea más bajo durante el ciclo de homologación y, por tanto, menor el consumo.

Con un mayor número de relaciones, el motor queda siempre más cerca del régimen de potencia máxima, que es donde la aceleración del coche es mayor. Por esa razón, la aceleración es algo mejor. Como en otras cajas de cambios modernas, el convertidor de par se puede bloquear en todas las marchas, lo que elimina completamente el deslizamiento siempre que sea posible.

Tiene tres programas: «S» (sport), «C» (confort) y «M» (manual) que se seleccionan con un botón que hay en la consola. Al igual que en el resto de la gama, la palanca se encuentra en la columna de la dirección. También hay botones en el volante para cambiar de marcha. En condiciones normales la distribución de fuerza es de un 40 por ciento al eje delantero.

Atmósfera

La Mercedes Benz ML 63 AMG, al igual que el resto de los autos de la gama, tiene una atmósfera enriquecida por tecnología de punta en el audio, en la comunicación con el teléfono celular vía Bluetooth y múltiples botones que ajustan, desde los pétalos de los asientos deportivos, hasta la distancia en la que se quiere mantener el volante.

Los diales de información son legibles y un tanto clásicos a pesar de ser la versión AMG, y los asientos están tapizados en cuero negro, son calefactables y los pedales están estilizados en metal con insertos de goma.

El velocímetro tiene una escala hasta los 320 kilómetros por hora y, tal y como lo hemos comentado con otros vehículos de la marca, el exceso de botones y sofisticación de las interfases, incluyendo el radio, rayan un tanto en lo barroco. Este punto debe ser trabajado porque el exceso de botonería disminuye el atractivo y se convierte en un elemento de distracción y no de integración con la camioneta.

Suspensión

La suspensión en esta todo-terreno, es neumática («Airmatic») con amortiguación adaptativa de control electrónico («ADS»); ambos dispositivos han sido revisados y adaptados a las nuevas exigencias. Los frenos, también de AMG, son más potentes. Los neumáticos son de medida 295/45 en llanta de 19"; opcionalmente puede llevar unos 295/40 en llanta de 20".

Impresión de manejo

La seguridad que ofrece un motor con mucho torque y potencia es inigualable. La ML 63 AMG, es fantástica en su manejo, su conducción es precisa y su comportamiento en curvas es por demás confiable.

Es una camioneta para un cliente razonador que no deja nada a apreciaciones subjetivas. Es un todo-terreno que, por sus características de aceleración, torque y potencia, está más enfocada a los ambientes urbanos que a los rurales.

Más allá de su precio, muy pocas personas saber que el emblema AMG no es una simple placa decorativa, sino que es masa muscular adaptada a una estructura confiable y poderosa.

Esta camioneta, a pesar de que en Europa se comercializa desde la primavera del 2006 y en México, apenas la estamos recibiendo, se puede definir en cuatro palabras: Poder aderezado con deportividad.

Lo que le alegrará el día:

-Su motor
-La deportividad que ofrece
-La sensación de poder al conducir

Lo que nos quedó a deber:

-La camioneta llega a ser ostentosa para nuestro entorno
-Las interfases pueden mejorarse para hacerlas más amigables al conductor
-Su consumo de combustible es elevadísimo

Precio: $107,500 USD

Competencia: Porsche Cayenne Turbo y la Volkswagen Touareg TDI

Para aprender más: AMG nace hace 35 años y es fundada por Hans Werner Aufrecht (A) y Erhard Melcher (M) en la ciudad de Grossaspach (G). Originalmente nombrada como "Oficina de ingeniería para el diseño y pruebas de motores de carreras", en aquel entonces el compromiso de AMG era el mismo que el de hoy: desarrollar vehículos de alto desempeño, con calidad y seguridad.

La filosofía de Mercedes-AMG se fundamenta en los mismos valores que los de Mercedes-Benz, calidad, seguridad, confort y protección al medio ambiente.

Los objetivos principales en el desarrollo de los vehículos AMG son: desempeño, deportividad e individualidad.

Como siempre, sus opiniones son importantes. Si tiene algún comentario, escríbame a cgonzalez@autocosmos.com

 

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