12 de marzo de 2007. La agencia de noticias Reuters informó que el grupo Chrysler efectuará un llamado a revisión que en realidad son tres, ya que el primero comprende 328,424 unidades de la Dodge Durango fabricadas entre 2004 y 2006 debido a que un circuito del tablero puede sobrecalentarse.
El segundo recall afecta a 149,605 unidades de la Jeep Liberty producidas entre 2006 y 2007 que pueden presentar problemas en el sistema de enfriamiento, y por más increíble que parezca el nuevo sedán mediano Avenger también tiene un recall de 10,994 unidades por problemas en los anclajes de las puertas.
¿Qué significa para Usted?
En realidad este tipo de noticias no son buenas para ningún fabricante, pero lo son menos para uno en la situación que atraviesa Chrysler, ya que no es buena señal para sus potenciales compradores. Asimismo y desde el punto de vista del consumidor el tener llamados a revisión en tres productos completamente distintos, que no comparten plataformas ni motores, hace pensar en problemas de calidad a nivel grupo y no como un problema aislado.